José Tomás, lesionado
Durante la faena a su primero, en un momento de descuido, al tratar de desmontar la muleta, José Tomás resultó arrollado. Pasó a la enfermería por su propio pie, donde se le diagnosticó luxación en el codo derecho, siendo trasladado a un centro hospitalario para un estudio radiológico.
Todos los defectos mencionados sobre el diestro de Galapagar se hicieron presentes en la tarde de ayer con más fuerza. A la ausencia y la apatía se le sumó el pasotismo, que, acumulado a la poca importancia de su enemigo, dio paso a la confianza, y ésta, al percance.
José Miguel Arroyo, Joselito, utilizó muleta y capote de ciencia ficción para torear al toro invisible. Posturas extraterrestres dentro de una faena despegada, hasta tal punto que un ovni podía pasar entre el animal de negro y el tipo de traje de luces. Todo dentro de una emoción surrealista. En el segundo, ante un torete con la misma presencia que el anterior, pero con movilidad, estuvo más entonado, y con la facilidad del que torea con la toalla en el cuarto de baño. Lució variedad con el capote, larga cambiada, verónicas, chicuelinas, revoleras con serpentina. Basó su faena con la muleta en la izquierda. Sobresalieron algunos naturales de calidad. El resto tuvo más vistosidad que verdad. Manoletinas, abaniqueo por la cara, con desplante antes de una gran estocada que puso la plaza en pie. En el que mató por José Tomás se limitó a pasaportarle.
Ruiz / Joselito, Tomás, Rueda
Toros de Daniel Ruiz. Justos de presentación; el corrido en 6º lugar, con problemas. Sospechoso de pitones. Nobles y justos de fuerzas. Joselito: pinchazo, media, rueda de peones, dobla (ovación y saludos); en el que mató por José Tomás, pinchazo, descabello (silencio); dos pinchazos, gran estocada (oreja). José Tomás: lesionado en su primero. Diego Rueda: cinco pinchazos, descabello (silencio); dos pinchazos, media trasera (ovación y saludos). En el que mató por José Tomás, dos pinchazos, media estocada, rueda de peones, dos descabellos -aviso-, dos descabellos (silencio). Plaza de Santander, 25 de julio. 5ª corrida de feria. Tres cuartos de entrada.
Voluntad y capacidad
Diego Rueda, nada que achacarle. Voluntad, toda. Capacidad, ninguna. La lógica se impuso; éste era su primer festejo de la temporada. Atropellado y sin recursos en su primero. Más entonado, pero sin seguridad en el que fue su segundo. En el que mató por José Tomás, parte del público protestó la presencia del toro, cuando incomprensiblemente había guardado silencio ante lo que les soltaron a las figuras, que no desmerecía nada del toro protestado. En ningún momento pudo con las complicaciones que le presentó su oponente. Con la izquierda, menos atropellado. Con la espada, un drama.
Este festejo dejó claro el mal momento que atraviesa José Tomás. Mucho tendrá que recapacitar, y ahora parece que va a tener un poco de tiempo para retomar el camino ilusionante que marcó en el inicio de su trayectoria como matador de toros. También quedó claro que la falta de trapío cuando torean las figuras no le preocupa a nadie.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.