El PSE percibe 'agotamiento' en el gobierno popular de Vitoria

Dos días antes de que se celebre el debate sobre el estado de la ciudad y cuando ya se ha atravesado el ecuador de la legislatura en el Ayuntamiento de Vitoria, el grupo socialista encuentra 'síntomas de agotamiento' en el equipo PP-UA liderado por Alfonso Alonso. Los socialistas que han dado a lo largo de todo el año su apoyo para un gobierno municipal que se encuentra en minoría en asuntos tan básicos como los Presupuestos o las ordenanzas fiscales, parecen iniciar un distanciamiento al valorar que el impulso del primer año se está desvaneciendo y apenas se generan proyectos.

Los populares se han visto obligados a llegar a relevantes acuerdos durante los dos primeros años de legislatura con el PSE, una situación que se ha atenuado en el último curso político según los socialistas, por una falta de capacidad de diálogo del equipo de Alonso. 'Los segundos años son de maduración de proyectos en los que se concretan estos planes', indicaba el portavoz del PSE, Patxi Lazcoz, 'Aquí sin embargo, las dos mayores propuestas en la ciudad proceden de la iniciativa privada', en referencia al centro comercial de Sidenor y a la implantación de la Universidad de Deusto en Vitoria.

Esta devaluación de la actividad local se concreta, según los socialistas, en aspectos como la conflictividad vecinal en la planta de residuos de Coronación, la inoperancia de los concejales de distrito, mayor inseguridad ciudadana y la 'anodina' gestión de los servicios públicos. Aluden a que una ciudad que siempre ha destacado por su calidad de vida aparece ahora en ciertos estudios en lugares rezagados dentro del país.

El pacto de presupuestario

El rumbo de las relaciones entre el equipo de gobierno conservador y el PSE pueden empezar a bifurcarse progresivamente tras el verano, fechas en las que los partidos inician los contactos para definir los presupuestos del año próximo. El portavoz socialista anunció ayer que plantearán en septiembre una batería de cincuenta propuestas en distintos ámbitos de la actividad municipal con el objetivo de 'revitalizar' Vitoria.

'Se trata de una aportación en positivo para que esta ciudad recupere ese liderazgo tradicional que ha ostentado en la política municipal tanto vasca como española', indicó Lazcoz. Las medidas, sobre cuyo contenido no avanzó detalles, se agrupan en cuatro bloques: los derechos de los ciudadanos ante los servicios públicos municipales, urbanismo y calidad de vida, impulso económico y tecnológico, y el ámbito de la familia como motor solidario.

Reconoció el representante socialista que la oposición que se ha desarrollado 'puede parecer extraña' por los acuerdos alcanzados con el gobierno. Lazcoz deja abierta la puerta para un otoño en el que el papel de su formación pase por exigir mucho más a los gestores municipales a los que les falta la 'capacidad de diálogo' de la que hicieron gala, bajo su opinión, en el primer año de legislatura.