'Si se supiera lo que dijo...'

Si las conversaciones entre los dos mayores partidos políticos españoles continuaran hoy por buen camino ambas organizaciones tienen ya decidido posponer el pleno de las Cámaras previsto para el jueves al próximo lunes para cumplir las 48 horas reglamentarias para convocara las Cámaras. Pero anoche de nuevo cundió el pesimismo.

El PP y el PSOE van acumulando argumentos por si se ven en la necesidad o simplemente quieren contar sus versiones de lo que ha pasado durante todos estos días en los que han roto y reanudado las negociaciones una y otra vez.

'Había un acuerdo el jueves pasado a la una y media de la tarde, seguía cerrado a las cuatro y a las siete el PSOE lo rompió', dijo ayer el secretario general del PP, Javier Arenas. '¿Por qué?', se le preguntó. 'No está en mi ánimo poner chinitas en el camino del acuerdo; solo digo que a las seis de la tarde el PSOE planteó argumentos que no dieron ni a las cuatro ni a la una y media'. Unos y otros empiezan frases del tenor de 'si se supiera lo que dijo...' pero no las acaban porque quieren que la negociación pueda fructificar.

'Buena fe' socialista

El PSOE no admite haber actuado mal sino que se vio sorprendido en su 'buena fe' cuando descubrió la identidad de alguno de los propuestos, como fue el caso del magistrado Roberto García Calvo, gobernador civil durante el franquismo, para el Tribunal Constitucional. En ese momento se les vinieron encima 'las reticencias', según denominación del PP, a determinados candidatos socialistas invocadas incluso por el presidente del Gobierno, José María Aznar.

Pero el PSOE prefiere que la película de los hechos se inscriba en las últimas horas e insiste en que todo estaría resuelto en el CGPJ simplemente con que el PP aceptara a la diputada del PNV Margarita Uria. El resto también sería posible si los candidatos respectivos obedecen a criterios de 'buena fe, confianza y lealtad, pero sin vetos, claro', precisó el portavoz socialista Jesús Caldera.