Los grupos contra la globalización declaran la guerra a Berlusconi y al G-8
Un paquete bomba contra la policía aumenta la tensión en las vísperas de la cumbre de Génova
Los intentos del primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, para suavizar las protestas por la cumbre del Grupo de los Ocho (G-8) que se celebrará en Génova el fin de semana han concluido, de momento, en fracaso. El masivo despliegue de fuerzas de seguridad en la ciudad, además de los estrictos controles en la frontera italiana por la suspensión temporal del Acuerdo de Schengen, han irritado a los grupos antiglobalización, que calificaron de 'mentiroso' al Gobierno italiano y anunciaron un recrudecimiento de las protestas.
El dirigente de uno de los principales grupos antiglobalización de Italia, Vittorio Agnoletto, considera que el Gobierno italiano 'ya no es un interlocutor creíble' y defendió su derecho a manifestarse contra el G-8. El clima de tensión aumentó ayer con el estallido de un paquete bomba en un cuartel de la policía de Génova. La explosión causó quemaduras en la cara y las manos de un agente.
Para los grupos antiglobalización, el atentado fue obra de los servicios secretos italianos para justificar el impresionante despliegue policial. Luca Casarini, otro de los líderes antiglobalización italianos, declaró que el paquete bomba era 'terrorismo de Estado puro' y un método 'para frenar los movimientos democráticos, como el de Génova'.
La policía está sellando con alambradas y bloques de cemento la zona roja que delimita el centro histórico de Génova y que, a partir del jueves, sólo podrá ser franqueada por los participantes en la cumbre. Parte de los grupos de protesta, que aseguran que concentrarán a más de 100.000 personas, han anunciado su intención de entrar como sea en la zona roja. Desde el pasado fin de semana se han reforzado los controles fronterizos italianos con Francia, Austria, Suiza y Eslovenia.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.