Fabra achaca la deuda al retraso de los pagos de la Generalitat
El presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, hizo ayer balance de dos años de mandato y ofreció un sinfín de cifras referentes a los 19.050 millones de pesetas que, según dijo, la Corporación ha invertido. Fabra se mostró 'satisfecho con la realidad de la provincia', así como con la coordinación mantenida con la Generalitat, 'puesto que se ha avanzado para acabar con los desequilibrios entre el interior y la costa'. El presidente de la Diputación hizo referencia al nivel de endeudamiento de la institución y lo achacó tanto a las inversiones como al retraso de la Generalitat en dos pagos que suman cerca de 2.500 millones de pesetas. Éstos se refieren a anticipos que la Diputación se ha visto obligada a costear para las obras de la piscina provincial y para el plan de infraestructuras culturales. Carlos Fabra se mostró seguro de alcanzar y situarse por debajo de los niveles de convergencia y calificó a los socialistas de 'ignorantes' después de que éstos usaran el término 'bancarrota' para referirse a las arcas provinciales. La crítica a la oposición no quedó aquí y Fabra les acusó de haber sido 'malos como gobierno y peor como oposición'.
'Cuando el PP accedió a la Diputación, ésta era absolutamente gris y la gran ignorada de la Generalitat', manifestó Fabra. 'Nosotros la hemos dotado del protagonismo y la personalidad necesaria', añadió. Según Fabra, en 2003 la Diputación podrá afrontar nuevos proyectos y en ese mismo año, los aviones llegarán al aeropuerto de Castellón con 400 pasajeros cada uno.
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