Juzgada una guardia civil por conducir pese a tener retirado el carné por circular ebria y matar a un joven

Una agente de la Guardia Civil fue juzgada ayer por conducir vehículos pese a tener retirado su permiso por orden judicial tras causar la muerte a un joven en un accidente de tráfico que tuvo lugar el 23 de enero del pasado año en Alicante. La imputada negó los hechos durante la vista celebrada en el Juzgado de lo Penal 2 de Alicante. La versión de la procesada, L. V., fue desmentida por el padre del joven fallecido y por una detective contratada por la familia. Ambos declararon que vieron a la mujer conducir en días posteriores al 25 de abril, fecha en la que el juez que instruye la causa del accidente de tráfico decretó la retirada cautelar del carné.

El accidente se registró durante la madrugada del 23 de enero de 2000 en la avenida de la Universidad de Alicante cuando, según el fiscal, la agente, que circulaba como mínimo a 105 kilómetros y en estado ebrio, colisionó contra otro turismo, cuyo conductor falleció. El fiscal imputa a la acusada un delito contra la seguridad del tráfico y otro de imprudencia grave. Por estos hechos solicita una pena de dos años de cárcel y otros tantos de privación del permiso de conducir. La vista oral por esto hechos está pendiente de celebrase.

Durante la declaración de ayer, por la querella que los padres de la víctima interpusieron posteriormente contra la agente, por conducir pese a terner el carné retirado, la procesada consideró 'ilógico' que ella condujera sabiendo que la estaban 'persiguiendo'. Por su parte, el padre del fallecido relató que vio en al menos dos ocasiones conducir a la acusada. Una detective contratada por la familia corroboró la versión del padre.