Las eléctricas advierten de posibles deficiencias en la distribución de energía este verano
Las compañías culpan a los ayuntamientos por negarles los permisos para ampliar la red
Las eléctricas hicieron ayer un doble llamamiento: a las administraciones municipales y autonómicas para que agilicen las autorizaciones que les permitan reforzar el tendido eléctrico, ampliando su capacidad; y a sus clientes, previniéndoles de que, en algunas zonas de gran demanda, se producirán 'deficiencias de calidad en el suministro eléctrico', según la expresión empleada por la asociación Unesa. Tanto Unesa, como las eléctricas Endesa e Iberdrola -las dos primeras del país con el 80% del mercado- se cuidaron de precisar que, en ningún momento, se puede hablar de 'apagones' al estilo de los que se han sufrido en California.
Mientras las compañías culpan a los ayuntamientos por las trabas que les ponen (en muchos casos por motivos medioambientales), fuentes del sector también apuntan a la responsabilidad de las eléctricas, que han desviado parte de sus inversiones hacia el exterior y otros sectores como las telecomunicaciones en lugar de centrarse en la mejora de la red.
En esa línea Unión Fenosa, la tercera eléctrica, se desmarcó ayer de sus rivales y afirmó que no tendrá ningún problema de suministro este verano. Según un portavoz, 'las malas relaciones con ayuntamientos y comunidades autónomas no son excusa suficiente para justificar los apagones'.
Rodrigo Rato descartó cualquier corte grave de electricidad para este verano, apeló a las administraciones responsables para que agilicen los trámites, manteniendo un equilibrio entre el interés general, el medioambiental y el de la calidad de suministro.
Red Eléctrica de España (REE), la empresa propietaria de la red de alta tensión que ya advirtió en un informe de posibles restricciones, afirmó que no espera que se produzca ningún problema de importancia en el suministro eléctrico este verano. Según sus datos, la demanda peninsular creció un 3,7% de enero a mayo y más del 6% en junio sobre el mismo mes del año anterior.
El 'síndrome California' Estos problemas de suministro que anuncian las eléctricas distan de ser apagones masivos por problemas de generación, como ocurrió en California. En España tiene raíces distintas, puesto que la generación está asegurada ya que se produce más electricidad de la que se consume. Las deficiencias se dan en la distribución y, más en concreto, en la red de media y baja tensión que llega a las empresas y a los domicilios de los consumidores. Pese a ello, ya hay algunas voces que piden que, al igual que en EE UU, se reabra el debate sobre la conveniencia de retomar la energía nuclear, como hizo ayer el presidente de Repsol, Alfonso Cortina. En el caso de Iberdrola, esas deficiencias pueden afectar especialmente a la comunidad valenciana, entre el sur de la provincia de Valencia y el norte de la de Alicante, donde ya se produjeron algunos cortes el verano pasado. La empresa achaca la sobrecagra de las líneas actuales y los 'fallos ocasionales' que se puedan producir, a la demora en más de 10 años de la instalación de la línea Vilanova-Gandía. La eléctrica que preside Íñigo de Oriol también advierte de deficiencias puntuales en Madrid y en algunos de sus municipios y, en menor medida, en Murcia, Cáceres, Albacete, Toledo y Soria.
Endesa considera áreas de emergencia las poblaciones del norte de la Costa Brava (suministrada por Fecsa) y del sur de Tenerife (Unelco). En el primer caso, la compañía denuncia el bloqueo de las licencias para el tendido de la línea Jiuia-Castell d'Aro, en Girona. En Tenerife, la eléctrica exige las autorizaciones de la línea Granadilla-Guía de Isora.
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