Problemas para el euro

Los inversores continúan con su peculiar evaluación de la coyuntura económica, lo que significa que todos están tan atentos como inactivos y que los precios mantienen el movimiento lateral.

La única sorpresa de esta jornada vino de la mano del euro, que tras fijar un cambio oficial en 0,8494 dólares, caía hasta los 0,8416 con la apertura del mercado estadounidense. Para los operadores del mercado de divisas, este descenso es una consecuencia de la desconfianza que ha provocado entre los inversores el resultado del referéndum en Irlanda, que viene a confirmar la inestabilidad de la UE como bloque. Estos operadores no descartan que en los próximos días el euro se acerque a los valores mínimos del pasado año que situaron la cotización del dólar por encima de las 202 pesetas. El valor máximo del dólar en la sesión de ayer fue de 197,75 pesetas.

La reacción de los mercados ante esta depreciación de su moneda fue nula y los cierres fueron, incluso, más suaves de lo que se esperaba, ya que en ese momento la Bolsa de Nueva York cedía 82 puntos y el mercado Nasdaq el 2,5%.

La Bolsa de Madrid perdió ayer el 0,09% y el Ibex 35 un 0,01%, unas cifras testimoniales en una sesión que, no obstante, contó con numerosas alternativas. Los analistas esperan que a lo largo de todo este mes la bolsa mantenga un tono similar al de las últimas jornadas, hasta concluir el cierre del semestre sin complicaciones, algo que mejoraría las expectativas que estos mismos analistas efectuaron al comienzo del ejercicio.