El Consejo de la Abogacía ratifica la suspensión de dos años a Gómez Menchaca

El Consejo Vasco de la Abogacía considera que el letrado Carlos Gómez Menchaca incurrió en una 'falta grave' por vulnerar las reglas éticas en el ejercicio de la profesión. De esta forma, el máximo órgano de la abogacía de Euskadi ha confirmado el acuerdo adoptado en octubre del año pasado por el Colegio de Abogados de Vizcaya, que suspendió al letrado por un período de dos años. Sin embargo, puede seguir ejerciendo la abogacía, ya que ha recurrido el fallo en la vía contencioso administrativa. La sanción se debe a las actividades de Gómez Menchaca en la Asociación de Víctimas de Errores Médicos, de la que es presidente y creador.

Su doble función como letrado y presidente de la asociación, especializada en presentar reclamaciones económicas a Osakidetza por supuestas negligencias médicas, supuso que algunos de sus clientes pasaran de ser sus defendidos a acusarle de estafa. Seis de ellos denunciaron su comportamiento ante el Colegio de Abogados, que sancionó al letrado con la suspensión del ejercicio de la abogacía durante dos años.

Carlos Gómez Menchaca recurrió el expediente sancionador ante el Consejo Vasco de la Abogacía, que ha resuelto recientemente el caso con un fallo que confirma la sanción que le impuso la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados de Vizcaya 'por falta de celo y diligencia en la misión encomendada', así como 'incumplimiento del deber del abogado de informar al cliente de la evolución del asunto encargado' y de la 'rendición de cuentas' de 'los fondos recibidos por el cliente'.

El abogado no está dispuesto a aceptar la decisión del Colegio Vasco de la Abogacía y la ha recurrido ante el Juzgado de lo Contencioso. En el caso de que este órgano judicial ratifique la sanción, Gómez Menchaca aún tiene otra posibilidad antes de verse obligado a renunciar al ejercicio de su profesión durante el plazo previsto de dos años: recurrir ante la Sala de lo Contencioso. Mientras, la ley le permite seguir trabajando como abogado.

El letrado ha expresado su enfado por la resolución dictada por el máximo órgano de la abogacía del País Vasco, una decisión que enmarca en una 'persecución' contra su persona. Además, ha emprendido acciones legales contra quienes lo denunciaron y contra varios medios de comunicación que se hicieron eco del caso.

'Modus operandi'

La resolución sostiene que el modus operandi del abogado expedientado es siempre el mismo y que 'en todos los expedientes y hechos denunciados es deontológicamente censurable'. Los clientes impulsores de las denuncias -que han constituido a su vez la Asociación de Afectados por Carlos Gómez Menchaca y Hermanos y víctimas de errores y abusos jurídicos y judiciales (Asahergomen)- han señalado que Gómez Menchaca ofrece desde el primer momento una opinión favorable a ganar el caso y solicita para hacerse cargo del mismo el pago de una cuota de 5.000 pesetas para entrar en su asociación y una cantidad en concepto de provisión de fondos que oscila entre las 50.000 y las 100.000 pesetas.

Pese a considerar 'grave' este hecho, los órganos colegiales estiman todavía más 'inadmisible' que el letrado 'no efectúe nunca la liquidación de los honorarios', pese a los requerimientos recibidos.

Sin embargo, el profesional no es el único frente abierto contra el creador de la Asociación de Víctimas de Errores Médicos, ya que sus clientes presentaron una demanda ante la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV). El ministerio público del alto tribunal vasco apreció indicios de un presunto'delito continuado de estafa' y remitió el caso al Juzgado de Instrucción número 3 de Bilbao para su investigación.

Se espera que la instrucción concluya en breve plazo de tiempo, una vez que la mayoría de los denunciantes ha declarado ya en el juzgado. El abogado expedientado, que está dispuesto a agotar todos los recursos a su alcance, ha recusado a la juez titular, según ha trascendido.