Llamazares garantiza que IU sólo apoyará un Gobierno PNV-PSE

El discurso que defiende Llamazares, y que ayer recibió el apoyo de los coordinadores, es el de 'romper el frentismo' con un Ejecutivo autónomo en el que estén incluidos nacionalistas y no nacionalistas. Y la fórmula ideal para IU es la de repetir el pacto PNV-PSE que marcó la política en el País Vasco hasta 1998, cuando los nacionalistas optaron por la llamada vía soberanista y pactaron con EH.

Llamazares, tras garantizar a los coordinadores que ésa será la única apuesta de IU y que no habrá sorpresas, pidió a los socialistas que rechacen el 'matrimonio de conveniencia' con los populares, que les convierte en 'actores secundarios', y que 'protagonicen' un acuerdo con el PNV que rompa la dinámica de dos bloques que se ha creado en los últimos tres años en Euskadi.

A propuesta de la federación de Madrid, los coordinadores presentes junto al líder de IU apoyaron que la campaña de la coalición debe estar centrada en ese trabajo de buscar la ruptura de los dos bloques. La principal preocupación de los sectores más críticos con el coordinador vasco, Javier Madrazo, es que éste centra su discurso en atacar duramente a Jaime Mayor, el candidato del PP, en vez de buscar un mensaje más claro de IU como eje de una nueva línea que acabe con el enfrentamiento. Muchos dirigentes desconfían incluso de que, pese a las claras directrices que se aprobaron ayer, Madrazo intente ir por libre y pretenda pactar con el PNV. Eso significaría, en todo caso, romper con la coalición y crear una organización propia en Euskadi, porque nadie que no fueran sus seguidores le apoyaría en esa estrategia. El líder de Ezker Batua (nombre de IU en el País Vasco) no asistió ayer a la reunión excusándose en necesidades de agenda.

Pese a la escasa fuerza que tiene la coalición en el País Vasco, similar a la que disfruta en la mayoría del resto de España, los números pueden convertir sus probables dos o tres parlamentarios -ahora dispone de dos- en claves para lograr una mayoría. Los estrategas de IU han diseñado una campaña dirigida a captar los votos de los 'sectores desencantados' tanto de EH como del PSE.

En el primer caso, IU confía en acercarse durante la campaña a quienes votaron en las últimas elecciones, poco después de que ETA declarara la tregua, a una EH que entraba por fin en las instituciones y parecía dispuesta a aceptar la vía pacífica para lograr sus fines. Esos votantes, creen los estrategas de IU, no pueden ahora apoyar a un partido que 'sigue fielmente la línea que le marca ETA'. Aunque no todos en la coalición están de acuerdo en buscar los votos de EH. Por el otro lado estarían, en la visión más optimista, los votos de los socialistas que no están de acuerdo con el 'actual seguidismo del PP' que atribuyen a algunos dirigentes del PSE.