'Si llegan las decepciones, el responsable seré yo'

Fumata blanca. Javier Imbroda Ortiz (Melilla, 1941) ya es el nuevo seleccionador nacional de baloncesto. Tras siete meses de espera, la Federación ha confirmado su nombramiento, un secreto a voces desde que Lolo Sainz dejara su cargo tras el fracaso en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000. El compromiso de Imbroda con el Caja San Fernando dificultó las negociaciones, pero finalmente se llegó a un acuerdo. El técnico, que ha cumplido 500 partidos en la Liga ACB, tendrá un contrato de tres años, hasta el Campeonato de Europa de Suecia 03, con una cláusula de rescisión sujeta a los resultados.

Pregunta. ¿Le ha felicitado el presidente del Caja San Fernando?

Respuesta. No me ha llamado.

P. Sus detractores lo tienen fácil. Fue copartícipe, como segundo de Sainz, del fiasco en Sidney y su imagen ha quedado tocada tras su marcha del Caja San Fernando.

R. Si la selección pasa por una etapa de triunfos, el éxito también será para ellos, para todos los que aman el baloncesto. Que haya disparidad de opiniones es normal.

P. Alguien podría achacarle que forzó con sus declaraciones que la directiva del Caja San Fernando le apartarse del equipo.

R. Para nada. Mi trayectoria está ahí y es muy clara. Hemos pasado una temporada muy mala. Pero algunos han monopolizado el problema por mi interés en ser seleccionador.

P. Sainz nombró a su heredero, pero la sucesión no fue pacífica.

R. A esto tendría que contestar la Federación. Tampoco hay que recrearse en la situación vivida.

P. ¿Cúal será la función de Sainz?

R. Es el coordinador de las selecciones sénior. Para mí, no será una novedad sentarme con él y con Ángel Palmi e intercambiar opiniones. Si hay que tomar una decisión, la última palabra la tendrá el que conviva con los jugadores y ése seré yo.

P. ¿Revolución o continuidad?

R. Ilusión. Ni revolución ni continuismo. En los Juegos no se estuvo al nivel esperado y estamos en un clima de decepción. Hay que intentar que la gente vuelva a ilusionarse con la selección.

P. ¿Su estilo de juego?

R. Cada entrenador tiene el suyo y lo impregna en su equipo. Los que hayan seguido mi trayectoria saben, más o menos, cómo va a jugar la selección.

P. ¿Mucha defensa?

R. Esto es baloncesto, no fútbol. Atacas y defiendes alternativamente. Un equipo se construye desde la defensa, aunque hay que procurar que en el ataque se saquen las mejores virtudes.

P. Usted logró que en una ciudad tan futbolera como Sevilla se hablara del Caja San Fernando. Ahora le toca ilusionar a un país entero con la selección.

R. Nos sentimos todos representados por el equipo nacional. Si llegan las decepciones, el responsable seré yo. Soy consciente del reto. La selección es un factor determinante para enganchar a la gente. Pero no el único. No hay que menospreciar a la Liga ACB o los torneos internacionales.

P. Dos meses de competición al año con la mejor generación de jugadores en mucho tiempo.

R. Los jugadores tienen grandes cualidades físicas y técnicas. Han sido los mejores del mundo en su categoría, pero ahora tienen que enfrentarse a otros mayores. Van ganando protagonismo y tienen que seguir ganándoselo. Pero en este país no hemos ganado casi nada. No podemos cargar sobre sus espaldas toda la responsabilidad. Necesitan crecer y madurar.

P. En la fase final de la Copa, en Málaga, circularon unas declaraciones suyas según las cuales Raúl López y Navarro aún no estaban preparados para ser titulares.

R. No, no dije eso. Una cosa es ser titular y otra llevar el peso de un equipo. Están llamados a ser básicos. Me encantaría que fuera de inmediato, pero no van a ser imprescindibles ya.

P. ¿Se les ha pasado el arroz a Herreros,Angulo o Reyes?

R. Creo que no. En España, lo que una semana parece bueno es malo a la siguiente. Tendemos a simplificar los análisis. A un jugador de 30 años lo consideramos viejo. Antes quizá empezaba el declive a esa edad, pero ahora están más preparados.

P. ¿Qué le viene mejor? ¿Que Gasol se marche a la NBA o que siga en Europa?

R. La decisión la debe tomar él, junto a su club [el Barcelona]. Me parecen sensatas sus declaraciones de que quiere ir a la NBA para triunfar. Está empezando a dominar la competición española.

P. ¿Su consejo?

R. No soy quien para aconsejar. Me encantaría que fuese cierto que va a marcar grandes diferencias en Europa. Pero vuelvo a decir que hacemos las declaraciones desde la exageración y la desesperación.

P. ¿Se ha cumplido su sueño?

R. Mi ilusión siempre ha sido competir con los mejores. Nunca imaginé que podría ser seleccionador. Pero, cuando la ves, la posibilidad se hace sueño. Es un honor sentarme en el banquillo nacional.