Lluís Llach afirma que hoy vivimos más que nunca un tiempo de revueltas

Lluís Llach, que entre los próximos días 2 y 5 de mayo actuará en el teatro Albéniz de Madrid -tras cuatro años de ausencia de la capital- con su espectáculo Temps de revoltes -en el teatro Albéniz de Madrid, afirmó ayer, durante su presentación, que, 'como el nombre indica, ahora vivimos, más que nunca, un tiempo de revueltas, y el ciudadano debe retomar la voz urgentemente'. 'Para un izquierdista como yo, tanto Pujol como Aznar me provocan eso, un tiempo de revueltas', añadió Llach.

El cantautor explicó que para él la vuelta al Albéniz, en donde estuvo hace cinco años con el espectáculo Porrera, 'es como regresar a casa; todo cantante tiene un teatro en cada ciudad, y yo en Madrid tengo éste'. 'Nada es casual y todo responde a mis necesidades interiores. Siempre me interesó este acompañamiento musical, que te da un amplio abanico de posibilidades para los arreglos musicales', apuntó Llach, quien recordó que, pese a que Temps de revoltes es el título de su último álbum y el espectáculo lleva el mismo nombre, no se trata de presentar su último trabajo musical. Temps de revoltes, publicado a finales del año pasado, incluye cuatro canciones nuevas y la cantata Germanies, una reflexión sobre el nacionalismo catalán como idea de futuro, con la participación de 130 voces, entre las que destacan las de la cantante cubana Lucrecia y el tenor Xavier Torra.

El espectáculo se estrenó el pasado mes de mayo en Valencia y desde entonces ha recorrido varias ciudades españolas. Después de Madrid viajará a Francia, Suiza y Bélgica, pero con fechas muy distanciadas 'para tener tiempos de descanso'.

En el espectáculo, Llach estará acompañado por Laura Almerich (guitarra, acordeón y coros), Anna Comellas (violonchelo), Dani Forcada (percusión y batería), Tato Latorre (guitarra acústica y bajo) y Edith Maretsky (violín y coros).

Repertorio

El repertorio de Temps de revoltes está elegido 'buscando una dinámica sonora y una dinámica emocional'. 'Pretendo revolver los esquemas emocionales de la gente que lo presencie, pero sólo para ellos, porque para mi propia satisfacción yo ya tengo mis orgías personales en casa', contó ayer Llach. En él interpretará grandes temas de sus 34 años de carrera, como L'Estaca o La gallineta, y algunos de su último trabajo, pero sin contar la parte de la cantata Germanies, porque 'es compleja y densa, y no me apetecía llevarla a escena'.

Llach señaló que con este espectáculo pretende 'recuperar cierto lirismo' de sus primeros montajes y que 'ahora tenía olvidado', y no descartó que a los bises de Temps de revoltes, aunque es 'un espectáculo cerrado en el que no suelo cambiar nada', interprete Campanadas de amor, 'a pesar de que la última vez que lo hice me tuvieron que llevar a casa exhausto'.