El puerto deberá costear un sistema de transporte público y el Ayuntamiento propone un monoraíl

El Ayuntamiento condiciona la aprobación definitiva del plan especial a un convenio con el Puerto que establece varios aspectos. Uno de los más importantes es que la Autoridad Portuaria se haga cargo de los costes de construcción y explotación de un sistema de transporte público, 'preferentemente monorraíl' según el documento, que conecte los edificios del Moll d'Espanya y los que se construirán en la zona de la nueva bocana hasta la estación de metro de la Barceloneta. 'Es imprescindible dotar de transporte público a una zona a la que acudirán miles de personas; se trata del territorio del puerto, así que le corresponde asumir esa carga', explicaba ayer el primer teniente de alcalde, Xavier Casas. Otra obligación que deberá asumir la Autoridad Portuaria es la urbanización de un nuevo tramo de paseo marítimo que arrancará en la plaza del Mar y llegará hasta los nuevos diques. Se trata de una superficie de unos 30.000 metros cuadrados, que incluye los viales y supondrá la piqueta para prácticamente el único viejo edificio -que ocupó el Acuario- que resiste a la reforma del frente marítimo. El convenio también supone para el Puerto la obligación de solucionar el problema de los desagües que ya soportan los vecinos de la Barceloneta. El Ayuntamiento insta a la Autoridad Portuaria a que resuelva la conflictiva vía de circulación de camiones que se produce en el tramo de la Ronda Litoral entre el paseo de Colón y la Zona Franca. La concesión de la licencia de edificación estará condicionada al derribo de parte de los edificios del Moll de Llevant.