Un atleta de bambú

'No lo duden, hacen bien en compararle con Jordan'. Baldomero Ballesteros, hermano y fiel representante de Severiano, uno de los golfistas más grandes de todos los tiempos, ha visto de cerca a muchos de los dioses del green: Arnold Palmer, Gary Player, Jack Nicklaus, Johnny Miller, Tom Watson... Pero vive fascinado con Tiger: 'He visto a casi todos los grandes y nadie, absolutamente nadie, ha jugado de forma tan matemática; Woods no necesita inventarse un solo golpe, porque siempre circula por la carretera, rara vez se mete en los montes'. En opinión de Ballesteros, dos cualidades distinguen al Tigre: su forma física y su fuerza mental. 'Tiene un control perfecto sobre sí mismo y sobre todos sus rivales, sabe en todo momento cómo le van a atacar y siempre tiene una velocidad más por si fuera necesaria'. Esta visión panorámica convierte a Woods 'en un humano más humano que los demás, en un superdotado'. 'Uno de los aspectos más atípicos del golf respecto a otros deportes es que en un torneo de cuatro días el jugador debe controlar a más de un centenar de rivales, incluidos los que despuntan por sorpresa'.

En cuanto a su extraordinario físico, Ballesteros le define como 'un atleta de bambú'. '¿Por qué le pega tan fuerte a la bola', se pregunta el representante de Severiano: 'Porque no es una estaca, es tan flexible y resistente como una caña de pescar de bambú, lo que le concede una potencia y velocidad extraordinarias'. Convencido de que 'ningún profesional del golf ha tenido semejante constitución', Ballesteros sostiene que si se llevara a cabo la idea lanzada desde algunos foros del golf para hacer los campos más largos y complicados para paliar los efectos de la tecnología, Tiger sería el gran beneficiado. 'Cuanto más compliquen el juego, mejor para él, porque domina todas las aristas de este deporte, es el mejor en largo, en corto y con el putt'. Ballesteros considera que Tiger, de sólo 25 años, aún tiene otros cinco por delante para progresar, 'tiempo que no les queda a sus rivales, todos por encima de los 30'. 'Que a nadie le extrañe que gane los tres títulos del Grand Slam que restan este año', sentencia Ballesteros.

¿Pero no hay nadie que pueda sofocar la voracidad del estadounidense? 'Quizá Olazábal apretando los dientes. Palmer tuvo enfrente a Nicklaus; Nicklaus, a Watson, y Watson, a Seve. Pero hoy día no veo al verdadero contrario de Tiger...'.