Diputados de 120 países condenan el terrorismo

El portavoz del PSOE, Jesús Caldera, consideró un éxito 'importantísimo' la aprobación de una resolución de condena del terrorismo en una Conferencia de la Unión Interparlamentaria a la que han asistido 1.400 parlamentarios en representación de 120 países. 'Es una gran noticia para España, porque se condena cualquier forma de terrorismo, y también su justificación política, filosófica, racial, étnica y religiosa. Esto', explicó, 'nos permitirá combatir a ETA con mucha mayor firmeza, porque 120 Parlamentos del mundo le dicen a la banda terrorista, y Cuba presenta esa resolución, que sus actos son criminales, que no tienen justificación política y que van a ser perseguidos en cualquier país donde se refugien'.

La delegación española asistente a la Conferencia de la UIP, que concluyó ayer en La Habana, estuvo presidida por el diputado del PP Guillermo Gortázar e integrada por parlamentarios del PSOE, del PNV y de CiU. Fuentes de esa delegación relataron que al principio Gortázar se opuso a que el tema del terrorismo fuese discutido durante la Conferencia.

La resolución cubana, finalmente aprobada por mayoría absoluta, es la misma que Fidel Castro propuso en la anterior Cumbre Iberoamericana, en Panamá, como alternativa a la condena explícita a ETA propuesta por El Salvador. 'El documento aprobado ahora demuestra la torpeza de Aznar, que durante la última Cumbre Iberoamericana, por desarrollar una política contra Fidel Castro, no consiguió que Cuba aceptara una resolución de condena a ETA', señaló Caldera.

El consenso dentro de la delegación española para apoyar la resolución cubana no fue fácil de conseguir. Además de los dos temas a debate programados con antelación en la agenda de la UIP -'El respeto al derecho internacional como garantía de la paz en el mundo' y la importancia de 'La educación y la cultura en el desarrollo de los pueblos'-, la 105 Conferencia de la Unión Interparlamentaria debía elegir un tercer tema a discutir. Cuba propuso 'El papel de los Parlamentos en la lucha contra el terrorismo', así como someter a aprobación una resolución de condena general al terrorismo. La delegación española se dividió ante la iniciativa cubana -el PP quería votar en contra, y el PSOE y el PNV, a favor-, y al final decidió abstenerse. Según diversas fuentes, el argumento de los diputados populares era que la resolución podría ser manipulada por Cuba para condenar a EE UU.

El plenario de la Interparlamentaria aprobó mayoritariamente que se discutiese el tema propuesto por Cuba y que se considerase su proyecto de resolución. En esa votación, la delegación española apoyó la condena al terrorismo, como la inmensa mayoría de las delegaciones parlamentarias.

'Es tremendo, pero queda demostrado que el Gobierno de Aznar carece de política propia en relación a Cuba y que más parece un representante de EEUU', afirmó Caldera tras quedar aprobado el documento. 'Lo que importa de esta resolución', subrayó, 'es que entienda el mundo de ETA, de HB y el País Vasco que Cuba no apoya el terrorismo, que Cuba lo condena radicalmente y que coincidimos en los fines'.

Por su parte, Gortázar dijo a este diario que no sabía si el voto de Cuba era una condena a ETA. 'Yo imagino que sí, porque al condenar el terrorismo de todas las clases y todas sus excusas, implícitamente Cuba está condenando a ETA'. El jefe de la delegación española afirmó que la resolución era 'globalmente positiva' al 'no plantear ningún problema de los que podía haber provocado un asunto tan delicado'.

El portavoz del PSOE criticó al PP por su política hacia Cuba. 'Cuba necesita un cambio. Cuba necesita una apertura política, pero para ayudar a conseguirlo hay que hacerlo desde el respeto, desde la autonomía, desde la cooperación, no desde la revancha, que es lo que propone Aznar'.

Durante su estancia en la isla, la delegación española se reunió con la Asociación de Empresarios Españoles en Cuba, que reclamaron un mayor apoyo del Gobierno español.