PP y PSOE aprovechan las propuestas de Ardanza para destacar la división en el PNV

Los ejes de la propuesta de Ardanza son la recuperación del Estatuto 'plena y lealmente desarrollado' como punto de encuentro entre nacionalistas y no nacionalistas; la separación de la violencia del conflicto político vasco de modo que no se aborde la solución del problema hasta erradicar la violencia etarra que se sitúa como objetivo prioritario; la admisión de que en Euskadi existe un conflicto político pendiente y la conformación de gobiernos plurales, entre nacionalistas y no nacionalistas, para afrontar estos retos.

Estas tesis, coincidentes con las que asumió el PNV en la etapa anterior al Pacto de Lizarra, de 1998, periodo en el que gobernó Ardanza, contienen, al menos, dos diferencias sustanciales con la que ha propugnado el Gobierno de Juan José Ibarretxe: la recuperación del Estatuto y la postergación de la salida al conflicto vasco a la resolución previa del terrorismo etarra.

Tanto el portavoz del Gobierno vasco, Josu Jon Imaz, como la secretaria del EBB del PNV, Josune Ariztondo, que asistieron a la conferencia de Ardanza, aseguraron que asumían estos cuatro puntos e incluso vaticinaron que también los órganos políticos que representan apoyaban esas tesis. Ariztondo matizó que el discurso del ex lehendakari no fue 'tan estatutista' ya que insistió en sus deficiencias y en la necesidad de reconocer que en Euskadi existe un conflicto político. En este sentido, el portavoz del PNV, Joseba Egibar, fue más tajante y se mantuvo en sus conocidas posiciones soberanistas.

Ariztondo aclaró también que la campaña electoral, a la que el PNV acude con un programa en el que defiende el derecho a la autodeterminación, eclipsará estas tesis. Pero vaticinó que las propuestas de Ardanza 'pueden dar luz tras las elecciones del 13 de mayo', dando a entender que podían ser la base para buscar un acuerdo postelectoral con partidos no nacionalistas. Ariztondo rechazó que su partido vaya a hacer 'una autocrítica en la plaza pública' y recordó que el giro que imprimió el PNV, en 1987, a favor de la colaboración gubernamental con el PSOE, 'se hizo sin echarse culpas sobre el pasado'.

Euskal Herritarrok (EH) interpreta que con la propuesta de Ardanza, el PNV prepara 'el aterrizaje constitucional y autonomista' de un acuerdo con el PSOE tras las elecciones.

El PP recibió con escepticismo el plan Ardanza. Tanto el vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy, como el candidato Jaime Mayor, señalaron que las tesis recogidas por Ardanza coinciden con las de su partido e invitaron a quienes las defienden a votar al PP. Rajoy dijo tajantemente que la dirección del PNV 'ha hecho esta legislatura exactamente lo contrario de lo que dice Ardanza'. El secretario general del PSOE vasco, Nicolás Redondo, destacó que la conferencia de Ardanza representa 'el descontento existente en el PNV'.