'Hace falta una campaña contra los abusos a inmigrantes'

El interés por España y el castellano le viene a la franco-senegalesa Pourmerá Rena Faye (Dakar, 1968) de las emigrantes españolas que trabajaban en su ciudad, París, cuando ella era pequeña. Perito intérprete, traductora y profesora de idiomas (habla francés, inglés, italiano, castellano, wolof...), su trabajo en el Centro de Idiomas de Granada hace que tenga que acudir como intérprete a los juicios que se celebran contra inmigrantes. Para ella, uno de los problemas que presenta el fenómeno hoy es la gran desinformación de los inmigrantes.

Pregunta. ¿Por qué decidió instalarse en Granada?

Respuesta. Vine a España con una beca del Parlamento Europeo para hacer mi doctorado en lenguas, y me ofrecieron como posibilidades Barcelona o Granada. Descarté Barcelona porque no tenía interés en aprender catalán. Granada me gustó más.

P. Además de profesora, también es intérprete en los juicios. ¿Cuáles son los delitos usuales de los inmigrantes?

R. Hasta ahora, el único delito que cometían era el de la estancia ilegal. Por lo general, los subsaharianos no suelen delinquir. Ahora sí está empezando a haber problemas con la venta ilegal de CD piratas, que es un delito contra la propiedad intelectual.

P. ¿Qué es para usted la inmigración?

R. Durante mucho tiempo, para mí, inmigración era sinónimo de bienestar social, de privilegio. Yo soy hija de un inmigrante, de uno de los primeros intelectuales africanos que fueron a Francia. En mi niñez conocí la cara amable de la inmigración. Ahora, en mis compatriotas estoy viendo la cara amarga, la clandestinidad, la falta de trabajo, la falta de asistencia sanitaria.

P. ¿Por qué se habla siempre de la inmigración como un problema?

R. Es un problema cuando la gente no viene a España en las condiciones adecuadas. Ahora mismo no hay espacio físico ni presupuesto para acoger a todos los que vienen. Y todo viene por la apertura del proceso de regularización, que hizo que los inmigrantes creyesen que, con sólo pisar España, ya tenían los papeles. Hay una desinformación tremenda que ha servido para que las mafias hagan su agosto.

P. ¿Cuál podría ser la solución?

R. En primer lugar, un acuerdo entre los grupos parlamentarios. Y luego, una gran campaña de información a los inmigrantes para que eviten los abusos, una campaña contra los abusos a inmigrantes.

P. ¿Qué piensa de la Ley de Extranjería?

R. Es una ley bastante polémica, porque afecta a derechos fundamentales, como el de asociación, el de reunión, el de atención sanitaria, el de educación. Tal y como está planteada, a largo plazo, no será viable.