La indefinición del club afecta a medio plantel del Barcelona

Las dudas que planean sobre la política deportiva del Barcelona con vistas a la próxima temporada afectan a una decena de jugadores pendientes de la renovación de su contrato, de su mejora o de saber siquiera si el club piensa seguir contando con ellos.

Dos fundamentales, Luis Enrique y Guardiola, concluyen sus compromisos el próximo 30 de junio. El club posee una opción para renovar de manera automática por una temporada el del asturiano, pero la pretensión de éste es que se le aseguren dos años de continuidad. Las negociaciones no han pasado de ahí. Respecto al catalán, la directiva ha lanzado mensajes contradictorios: el de la continuidad incondicional, ofrecido por el presidente, Joan Gaspart, y el de los límites presupuestarios, argumentados por el vicepresidente económico, Joan Castells.

A Xavi, Gabri y Puyol, tres jugadores de la cantera que se han consolidado en el primer equipo, se les ha prometido la mejora de unas fichas que no superan los 70 millones y que no resisten la comparación con la del todavía en el filial Nano, que asciende a 90 millones. El representante de Xavi ya ha presentado una oferta de mejora de su contrato por la que el medio centro pasaría a cobrar unos 250 millones. En el club, al igual que en la mayoría de los casos, se le ha comunicado que se piensa seguir contando con el jugador, pero no se le ha dado ningún tipo de respuesta concreta.

Iván de la Peña está a la espera de saber si continuará en calidad de cedido por el Lazio o si el Barça ejercerá la opción de compra a final de temporada. Kluivert no concluye su contrato hasta junio de 2002, pero su ficha, alrededor de 400 millones, ha quedado desfasada después de la mejora de la de Rivaldo -unos 1.100 millones- y por ello está en plena y por ahora nada satisfactoria negociación.

Prácticamente en todos los casos la respuesta obtenida en los despachos ha sido de lo más ambigua. Hay quien sospecha que hasta el momento todas las conversaciones no han sido sino maniobras dilatorias hasta que la directiva decida quiénes ocuparán la temporada próxima los cargos de entrenador y de director deportivo. En la actual los dos los ostenta la misma persona, Llorenç Serra Ferrer, a pesar de que la junta ha manifestado públicamente que habría deseado una separación de poderes que no se hizo efectiva porque decidió asumirse la herencia de la etapa anterior.

De quién sea finalmente el técnico -ayer, desde Argentina, se aseguraba que Carlos Bianchi, el del Boca Juniors, se va al Camp Nou con su estrella, Riquelme- puede depender el futuro de varios jugadores con contrato en vigor, como Arnau, al que el pasado verano ya se le propuso que recalara en el Valladolid, o como Dani, por el que el club ha recibido algunas ofertas en firme, como la del Middlesbrough. Incluso no se descarta la posibilidad de que sea traspasado Rivaldo, del que ayer decía la prensa italiana que podría pasar al Lazio en una operación por la que el argentino Verón se convertiría en azulgrana.