Crítica de danza
Escribo estas líneas en referencia a la crítica publicada en su diario el pasado 4 de marzo sobre el espectáculo Don Juan, de la compañía Iliacan, que dirijo, y que firma Carmen del Val. Dado lo vejatorio de lo que se dice en ella, creo tener el derecho de replicarle.
No entraré a discutir las opiniones vertidas en su crítica porque, aunque al autor le duela que su obra no guste a alguien, creo que en este caso me siento mejor perteneciendo decididamente a otro paisaje estético y emocional que Carmen del Val no ha hollado jamás.
No se puede ni debe consentir llegar al insulto personal ni a utilizar un tono tan peyorativo sin apoyarse para ello en ningún argumento de peso, ni despreciar frívolamente el trabajo serio de unos bailarines profesionales de alto nivel que realizan su trabajo con dignidad, eficacia y valentía.
Finalmente, añadiré que siento contradecir a la señora Del Val porque no he visto el espectáculo Mazurca Fogo, que debí 'copiar con prisas y sin profundizar', como afirma, así que debo suponer que tengo más talento del que ella ha sabido ver en mí.-
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