1.000 firmas en el inicio de la campaña para salvar la huerta

La fiesta de ayer en Valencia, con 'dançades, ball de l'anguila de Figueroles, ball de bastons, cercavila amb tabalets i dolçaines...', tal y como rezaba el programa de la apertura oficial de la campaña de recogida de firmas, se parecía en el aspecto externo a otras iniciativas para recabar apoyos de los ciudadanos, de esas que abundan en muchas esquinas de la grandes urbes. Sin embargo, la dinámica que marca la ley para promover una ILP hace que el procedimiento sea bastante más serio.

Así, los promotores de la iniciativa a favor de la huerta valenciana repartían folletos y daban todo tipo de explicaciones a los ciudadanos que se interesaban por la reunión en la plaza de la virgen.

Allí se les informaba que sólo podían firmar los ciudadanos censados en la Comunidad Valenciana y mayores de 18 años, es decir, con derecho a voto. También debían aportar su número de DNI y decir la localidad en la que están censados, puesto que cada pliego de firmas recogido ha de ser comprobado y validado en la oficina del censo electoral. También se les comunicaba que no se trata de hacer bulto, firmando en todas las mesas que se encuentren a su paso, ya que los votos repetidos se invalidan.

Todas estas precauciones, de las que se hacen responsables los más de 300 fedatarios que han jurado su compromiso en las Cortes Valencianas, según datos de los organizadores, servirán para que el proyecto de ley pueda llegar a buen término. No en vano, sólo tienen cuatro meses para reunir las 50.000 firmas necesarias para tramitar en Cortes una ley que no haya propuesto ningún grupo parlamentario. Aun así, los promotores aspiran a reunir más del doble de los apoyos.

En medio de la fiesta, José Luis Miralles, uno de los cinco miembros de la Comisión Promotora de la ley acreditados en las Cortes, explicó ayer que más de la mitad de la huerta tradicional valenciana ya ha desaparecido, y que apenas quedan 5.000 hectáreas de uno de los paisajes más emblemáticos de la Comunidad. Por eso mostró su optimismo ante las más de 1.000 firmas captadas sólo en la fiesta de ayer.

Según explicó, un día antes de esta inauguración oficial de la campaña, en una fiesta en Alboraia se recogió otro millar de firmas, a las que habrá que sumar todas las que ya hayan recogido por su cuenta los fedatarios y las que se están reuniendo en las mesas instaladas permanentemente en organizaciones afines a la causa, desde el Centre Excursionista de Valencia hasta, por ejemplo, Acciò Ecologista Agró o CC OO.