La federación ve como 'prueba definitiva' el partido contra Francia
Doce goleadas en 73 años -diez hasta 1985- y las dos últimas en sólo siete meses: un 4-1 en Alemania en agosto y el 3-0 del miércoles en Villa Park. Y las dos con José Antonio Camacho de seleccionador, un técnico muy valorado por su capacidad para motivar al grupo. Dos varapalos coincidentes con el esplendor de los clubes españoles y de unas selecciones inferiores que suman once títulos en los últimos 15 años. Camacho había insistido durante el europeo de los Países Bajos que junio es un mes maldito para la selección, por la sobrecarga de partidos con la que llegan los jugadores. 'Si las fases finales se jugaran en frebrero nos iría mucho mejor', vino a decir el seleccionador tras el fiasco de la Eurocopa. Pero la supuesta frescura física de febrero ha quedado rebajada por la falta de alma, como se vio en Inglaterra. 'Estamos preocupados', dijo ayer un directivo de la federación, 'pero seguros de que el equipo recuperará el tono frente a Francia', el próximo día 28 en Valencia. En la federación se considera que el Madrid-Barça ha solapado el choque en tierras inglesas. 'Todo influye, la gente estaba inicialmente motivada, pero luego salió un día tonto', reflexionó el directivo. La federación ha aplazado otras conclusiones hasta el choque con Francia: 'Ese día todo el mundo estará pendiente del partido y será una prueba definitiva para saber si realmente lo sucedido en Inglaterra fue un accidente'. Si se pierde ante Francia, se replantearía el 'modelo', pero 'en ningún caso' la continuidad de Camacho. En este sentido, Gerardo González, secretario de la FEF, fue tajante: 'Su proyecto sigue siendo ilusionante y lo digo con toda la fuerza institucional; Camacho es el hombre'.
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