Enseñanza reacciona airada ante el plan de guarderías alternativo del PSC

El Departamento de Enseñanza de la Generalitat orquestó ayer una airada respuesta a las propuestas de la oposición socialista sobre la creación de plazas de parvulario para el tramo de cero a tres años, que la consejera Carme Laura Gil calificó de 'propuesta fantasma'. Paralelamente, Enseñanza y el Ayuntamiento de Barcelona firmaron un convenio para la creación de 1.000 plazas públicas de parvulario, aunque a mitad de precio que las actuales.

La consejera no tuvo reparos en admitir que su comparecencia ante la prensa tenía como objetivo dar una respuesta al plan para la creación de plazas de guardería de cero a tres años presentado la semana pasada por la responsable de Enseñanza del Gobierno alternativo de Pasqual Maragall, Montse Duch. Gil declaró: '[Es] una propuesta fantasma, una mala copia de lo que hacemos nosotros'.

La titular de Enseñanza heredó el cargo con la hipoteca de crear 30.000 de estas plazas en cinco años, como prometió ante el pleno del Parlament su antecesor Xavier Hernández en plena precampaña de las elecciones autonómicas. Gil, que ayer no tuvo reparos en admitir que se trata de 'un número mágico', ha intentado reducir esta cifra inabarcable a niveles asumibles. Para ello ofreció subvenciones a los ayuntamientos intentando que fueran los entes municipales los que cargaran con el peso económico del proyecto.

La teoría repetida por Enseñanza es que, al margen de la financiación de las infraestructuras, del lugar físico donde se situaría la escuela, el coste de cada plaza debe ser asumido a partes iguales por la Generalitat, el Ayuntamiento y la familia del niño. El problema es que la primera oferta de la Generalitat se quedaba en la ridícula cifra de 80.000 pesetas por plaza y año, que ahora ha elevado hasta acercarse a las 200.000, siguiendo en esto la propuesta de mínimos del PSC. La consejera aseguró que el coste anual de estas plazas se sitúa en torno a las 450.000 pesetas, sin incluir la comida.

Hasta la fecha no se ha creado ni una sola de estas plazas, pero la consejera anunció ayer que a la convocatoria para la concesión de estas subvenciones se han sumado 164 ayuntamientos y 174 parvularios, que han solicitado un total de 5.973 nuevas plazas. En este momento, aseguró, 3.710 han sido aprobadas y 2.263 están en trámite.

Estas primeras 3.710 plazas que corresponden a 98 guarderías, podrían estar listas para ser ocupadas en septiembre de 2002, y la inversión en infraestructuras que tiene previsto llevar a cabo la Generalitat será de 1.267,9 millones de pesetas. El resto de solicitudes queda repartido entre las 73 que están en trámite (2.263 plazas) y las 3 que presentaron su renuncia.

Demanda variable

De acuerdo con los cálculos de la consejera, Enseñanza ha creado ya 7.000 plazas; las 5.970 más las 1.000 que figuran en el convenio con el Ayuntamiento de Barcelona. Siguiendo el hilo de estas cuentas, para el próximo curso la tasa de escolarización será del 55,6% entre los niños de dos años -'habremos superado el 50%', dijo-, del 29,4% para los que tienen entre uno y dos años, y del 6,5% para los menores de un año. Esta proporción es la que básicamente establece la demanda, ya que muy pocos padres optan por llevar a la escuela a los menores de un año. El problema es que ninguna de estas plazas existe todavía ni estarán disponibles el curso que viene.

La consejera negó rotundamente que estas nuevas plazas ya existan de forma no reglada y que los ayuntamientos aprovechen para hacerlas oficiales. También negó la existencia de un decreto de evaluación para los alumnos de Infantil relacionado con la capacidad de lectura.