El Gobierno yugoslavo estrecha el cerco judicial en torno a Milosevic

Acusado de ejercer en un principio una cierta neutralidad respecto al destino del ex presidente yugoslavo Slobodan Milosevic, el Gobierno de Belgrado está comenzando a cerrar el cerco en torno al ex mandatario balcánico. La última vuelta de tuerca ha sido la detención de uno de sus máximos colaboradores, el antiguo jefe de la poderosa policía secreta Rade Markovic, quien va a ser investigado por un atentado al líder opositor Vuk Draskovic, en el que murieron los cuatro guardaespaldas de este último.

La detención de Markovic supone que las responsabilidades penales por atropellos sucedidos durante la era de Milosevic han llegado ya al círculo más próximo al ex presidente, y las nuevas autoridades yugoslavas anuncian que pronto se irá más allá.

El primer ministro de Serbia, Zoran Djindjic, declaró en la madrugada de ayer que cree que el ex presidente yugoslavo ha 'violado' la ley. 'Pienso personalmente que Milosevic ha violado la ley y que es posible encontrar puebas contra él', declaró Djindjic al regreso de un viaje de dos días a Moscú.

'Milosevic será seguramente objeto de una investigación judicial; en cuanto a saber si ésta llevará a su detención, la decisión tendrá que tomarla la justicia', añadió, según la agencia de noticias Beta. 'Habrá seguramente detenciones y procesos en Serbia', añadió el primer ministro.

Sin embargo, el posible procesamiento judicial de Milosevic no es algo que sea objeto de consenso unánime en la variopinta coalición de partidos que forma DOS, grupo actualmente en el Gobierno desde que el 5 de octubre del año pasado Milosevic fuera derrocado por una insurrección popular.

La mayoría de los dirigentes de la coalición se oponen a que el antiguo presidente yugoslavo sea juzgado en el Tribunal Penal Internacional para los Crímenes en la Antigua Yugoslavia, que acusa a Milosevic de genocidio y crímenes de guerra. La misma mayoría cree que sería más adecuado procesar al todavía dirigente del Partido Socialista por corrupción y abuso de poder.

En este contexto, el detenido ex jefe de la policía secreta podría convertirse en la pieza clave para emprender el procesamiento de Milosevic. 'La detención no es, ni mucho menos, el último paso hacia la instauración del Estado de derecho, forma parte de una serie de acciones que terminará, quiero creerlo, con la detención de Milosevic', señaló Cedomir Jovanovic, jefe del grupo parlamentario de DOS en el Parlamento de Serbia.

La detención de Markovic ha levantado críticas no sólo entre los simpatizantes de Milosevic, sino también entre sus opositores, aunque en un sentido contrario. Muchos critican los meses de demora, tal vez fundamentales en la investigación de los hechos, desde que la DOS accediera al poder y la captura del colaborador de Milosevic. 'No hay que preocuparse, existen suficientes testimonios y suficientes pruebas', señaló el viceprimer ministro serbio, Zarko Korac.

Desde la formación del Gabinete serbio han sido destituidos varios cargos del Ministerio del Interior y presidentes de algunos tribunales serbios por ineficacia en la lucha contra el crimen organizado y la corrupción.