El Barça no puede con la Liga

'No voy a tirar la toalla por respeto a la afición, pero la Liga está casi imposible'. Luis Enrique, el goleador del Barcelona, resumió así el sábado el sentir del Camp Nou después de que Víctor, del Deportivo, lograra en el tiempo añadido un gol antológico que deja el título casi en cosa de dos. Tras golear por 7-0 al Athletic en una noche memorable, el Barça se ha derrumbado con dos derrotas significativas: primero, ante el colista (4-0) y después ante el campeón (2-3). Las cábalas se han ido al traste: el vestuario quería sumar 12 puntos consecutivos antes de ir al Bernabéu, el 3 de marzo, y, como mucho, si gana a la Real Sociedad, sumara 6. El Madrid, el líder (51), ha abierto la mayor brecha del año con el Barça, cuarto (40). El Deportivo es el segundo (47) y el Valencia, otra vez, el tercero (42). Éstas son algunas claves para explicar la caída barcelonista.

- 1. Mala planificación. El Barcelona empezó el curso con el pie cambiado: se fue Josep Lluís Núñez, se largó Louis van Gaal y se dejó todo a expensas de las urnas. Todos los candidatos acordaron que Llorenç Serra Ferrer, un hombre de la casa, era el más indicado para dirigir el equipo. La euforia por la marcha de Van Gaal y la dolorosa fuga de Figo eclipsaron una certeza: no habían dejado muchos futbolistas para armar un gran equipo. Todos los fichajes fueron impuestos: Dutruel y Overmars (Van Gaal), Gerard (sugerido por el candidato Bassat), Iván de la Peña, Alfonso y Petit (Gaspart). Quedan las dudas de si el mallorquín los quería: él había pedido a Zidane (Juventus), Henry (Arsenal) y Beckham (Manchester) para suplir a Figo.

- 2. La lesión de Guardiola. El Barça de los últimos años se basaba en este triunvirato: Figo, Guardiola y Rivaldo. El portugués se marchó, el capitán se lesionó y el equipo se quedó sólo con el brasileño y con un grupo mayoritario de holandeses que esperaban tener vida después de Van Gaal. Con Xavi en Sydney, el Barça se quedó además sin el medio centro, la pieza angular sobre la que gira el equipo y que le da personalida. La lesión de Guardiola fue devastadora. El dato es significativo: con él en el campo, y ha jugado 20 encuentros, el Barça sólo ha perdido uno: ante el Deportivo en el Camp Nou.

- 3. Dudas en el sistema. El Camp Nou tiene una segunda piel: la del fútbol ofensivo. Serra Ferrer debió de recordar que Robson sufrió pañoladas con un 6-0 y renunció a su estilo conservador para seducir. Pero lo hizo a medias: jugó con tres defensas y dos puntas para desesperación de Kluivert. El equipo vaciló y fue capaz de lo mejor y lo peor. Con Kluivert y Overmars lesionados, llegó la eliminación de la Liga de Campeones. El Camp Nou vio en octubre cómo se le iba Europa (0-2 ante el Milan) igual que el sábado intuyó que se le escapaba la Liga. Ninguno de esos dos días jugó mal. Al Barça se le fueron los títulos ante los débiles (3-0, Besiktas; 4-0, Racing).

- 4. Una reacción frustrada. El Barça se hundió en Zaragoza (3-1) y reaccionó en la Copa de la UEFA (0-2 en Brujas). Los canteranos y los holandeses, que han bebido en las mismas fuentes, pactaron con el técnico reforzar la zaga (de tres a cuatro hombres) y abrir el juego por las bandas. Todo eso coincidió con la vuelta del capitán y la explosión de Overmars y Simão, que superó las expectativas como recambio de Figo. El Barça encadenó 18 jornadas sin perder, pero las lesiones de los extremos frustraron la racha: cayó primero Simão (7-0 ante el Athletic); luego, Overmars (1-1 ante el Espanyol), y, sin ellos, dos derrotas. El recurso, Zenden, se quebró el sábado.

- 5. Fichajes erráticos. Joan Gaspart invirtió 10.000 millones de pesetas en fichajes y quizá ahora se arrepienta. Dutruel (parte de la afición le culpa de la eliminación de la Liga de Campeones) ha sido relevado por Reina, últimamente vulnerable; Petit y Gerard son suplentes; Iván sigue lesionado y Alfonso ha defraudado. Overmars, pese a su divorcio con el gol, es el único que ha convencido. Pero el problema es mayor: el Barça sufre una inflación de medias puntas (Rivaldo, Luis Enrique, Cocu, Gerard, Iván de la Peña) y escasez de recambios en los extremos. Tampoco le sobran defensas (Cocu ha jugado de central y Gabri ha sido reciclado como lateral) y los delanteros reservas no han funcionado. Alfonso sólo ha marcado dos goles en la Liga y Dani ninguno. Es un equipo fuerte por dentro y débil por fuera, empezando por los laterales y acabando por los extremos.

- 6. El tirón del Madrid. La teoría de los vasos comunicantes. La boyante situación del Madrid agrava la del Barça. Los azulgrana aspiran a competiciones menores (la Copa del Rey y la Copa de la UEFA). Y, además, el Deportivo y el Valencia, que parece haber superado su crisis, siguen en la Liga de Campeones.

- 7. El desgaste de la afición. El público ha ido de desengaño en desengaño. El equipo ha sido demasiado irregular (de enamorar con un 7-0 al bochornoso 4-0 ante el colista) como para engancharse al Camp Nou. Fuera de Europa y casi de la Liga, la directiva deberá recurrir a la imaginación o a los golpes de efecto para que los jugadores no se queden solos en la Copa de la UEFA ni en la Copa del Rey.

- 8. ¿Podía hacer más el técnico? La pregunta queda en el aire, pero no parece que las iras vayan contra él. Consciente de su papel interino, se ha puesto siempre delante de los jugadores sabiendo quizá que tiene fecha de caducidad. Dijo que no tiene miedo: '¿Por qué, si hago mi trabajo lo mejor que puedo?'. El asunto es saber si ha sabido capitalizar a la plantilla o ésta no da ya más de sí. Ha habido futbolistas intocables y el equipo acabó fundido ante el Deportivo. La preparación física también se cuestiona.

- 9. En manos del Celta. Si el Barça elimina al AEK y el Celta al Stuttgart, se cruzarán en los cuartos de final de la Copa de la UEFA. Tienen otra cita concertada en junio: las semifinales de la Copa.