Vodafone y BT inician el proceso para sacar Airtel a Bolsa antes del próximo verano

Los británicos, que comparten el capital de Airtel con la constructora Acciona y la sociedad de inversiones de Juan Abelló (Torreal), creen que la operadora ha adquirido madurez suficiente para salir a Bolsa de forma inminente. La colocación, que ha sido paralizada por los socios multinacionales de Airtel en ocasiones anteriores, ofrece ahora a BT importantes ventajas y ha despertado un enorme interés entre los bancos de inversión. Sin embargo, Vodafone todavía mantiene algunas diferencias respecto al diseño de la operación, los porcentajes, la valoración y los plazos, que podrían hacer fracasar el proceso.

Pese a las incertidumbres, los dos accionistas de referencia de Airtel han iniciado el estudio de la salida a Bolsa con varias entidades financieras españolas y extranjeras. Todavía no han elegido las tres que coordinarán la operación, pero está previsto que la selección se haga en los próximos días para que pueda empezar a definirse el calendario y las valoraciones. Por el momento, las entidades consultadas han recomendado esperar a que se aclare el panorama bursátil y se conozca el resultado de la colocación de Orange antes de fijar criterios. El objetivo es que Airtel cotice antes del verano.

Orange, controlada por France Télécom, se estrena mañana en los mercados de París y Londres, después de que sus gestores hayan recortado por dos veces la valoración inicial de la compañía (de 150.000 millones de euros el pasado año hasta los 52.800 millones del pasado jueves). Telefónica Móviles, la otra referencia en el proceso, pierde un 12,28% desde su estreno en Bolsa.

BT es responsable de acelerar el proceso. La venta del 17,8% de la operadora española, una de las más exitosas en Europa (tiene 7,5 millones de clientes, un 29% del mercado por usuarios y un 33% por ingresos), generará importantes recursos, que BT pretende destinar a reducir su abultada deuda. Además, su desvinculación de Vodafone permitirá a BT volcarse en desarrollar una estrategia propia a través de su filial en España, BT Tel.

La operación dejará a Vodafone como dueño y señor de la operadora que rompió el monopolio de Telefónica en 1995. Tras la colocación y la salida de sus socios, la compañía británica podrá poner en marcha la integración de Airtel en su estructura europea. Según sus planes, la marca Airtel se mantendrá para la salida a Bolsa y durante al menos un año más, pero después se integrará en el grupo multinacional, de forma que pasará a Vodafone Airtel y posteriormente -en un plazo cercano a los dos años- a Vodafone España, en línea con su estrategia paneuropea.

Otro aspecto importante es que los recursos generados servirán para financiar la nueva red de tercera generación (UMTS) que Airtel tiene que construir para incrementar su capacidad de transmisión y hacer frente a la competencia de nuevos operadores con nuevos servicios multimedia. La incertidumbre sobre la nueva tecnología es el argumento utilizado por algunos consejeros de Vodafone para defender un retraso en la salida a Bolsa, ya que puede someter a la gestión a mayor tensión y una fuerte inestabilidad. En cualquier caso, los partidarios de la colocación creen que Vodafone también debería vender parte de sus acciones para demostrar confianza en la operación.

La colocación también ofrece ventajas para los dos únicos grupos españoles que se mantienen en Airtel: Acciona y Torreal, con un 6% y algo menos del 3%, respectivamente. Ambos se han comprometido a no vender sus participaciones en metálico hasta enero del próximo año, por lo que la salida a Bolsa les ofrece una oportunidad de realizar plusvalías antes de ese plazo.

Diferentes valoraciones

Cuando Vodafone acordó comprar al Banco Santander Central Hispano (BSCH) su 30,45% el año pasado, los británicos valoraron Airtel en 4,7 billones de pesetas (unos 28.500 millones de euros). La operación, que ha dado al banco el 2,7% del mayor grupo mundial de telefonía móvil, también supuso la marcha de las cajas de ahorro vascas BBK y Kutxa, Caja Asturias, Unicaja y de la Corporación Financiera Alba, controlada por la familia March y ahora accionista de Xfera, uno de los futuros competidores de Airtel con UMTS.

El nuevo reparto accionarial ha llevado aparejada una profunda remodelación del consejo de administración de la compañía (se ha reducido de 22 a 15 miembros), la sustitución de Juan Abelló (Torreal) por José Manuel Entrecanales (Acciona) y un fortalecimiento del primer gestor de la compañía, Ignacio Sánchez Galán, que ha sido refrendado por Vodafone y participa en el comité paneuropeo de la compañía.