De la Peña identifica al preso fugado que le siguió desde el Camp Nou
La policía sospecha que los dos hombres -sólo uno de ellos fue detenido- que siguieron el pasado lunes a Iván de la Peña desde el Camp Nou hasta la vivienda de sus suegros, en Barcelona, no querían secuestrarlo para pedir un rescate, sino simplemente retenerlo para obligarle a sacar para ellos dinero de los cajeros automáticos con sus tarjetas de crédito.
Los agentes conducirán hoy ante el juez de Gavà a Santiago Carrón, un preso fugado de la cárcel Modelo, de la capital catalana, y que fue detenido horas después de seguir al jugador barcelonista gracias a que éste anotó la matrícula de su coche y la facilitó. De la Peña le identificó ayer en la rueda de reconocimiento. Su cómplice sigue en paradero desconocido.
Carrón pasará a disposición judicial acusado de robo con intimidación y detención ilegal por haber sustraído el sábado un vehículo y haber obligado a su conductor a ocultarse en el maletero. La víctima logró huir. También se le acusa de atentado contra la autoridad -disparó con una pistola de fogueo trucada contra un agente- y de tentativa de detención ilegal por sus intenciones respecto a De la Peña, aunque en su casa no había información sobre él.
El vestuario azulgrana no ocultó su inquietud por lo sucedido, aunque evitó la alarma. Xavi negó que haya psicósis y Zenden descartó ir con guardaespaldas. 'No pienso vivir angustiado por eso', abundó Sergi.
El madridista Helguera comentó: 'Yo, cuando voy por la calle, no miro nada y no habría apuntado la matrícula. Me habrían secuestrado, seguro. Pero no tengo miedo. ¿Quién me va a secuestrar a mí?'.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.