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LA OFENSIVA TERRORISTA

Detenido en Barcelona el presunto etarra hijo de un comisario cuando iba a entregarse en los juzgados

Diego Sánchez Burria, de 24 años, presunto etarra hijo de un comisario de policía, fue detenido anoche en las inmediaciones del edificio de los Juzgados de Barcelona cuando se dirigía a entregarse, según informaron fuentes policiales. El supuesto colaborador del comando Barcelona fue localizado sobre las 21.00 por dos agentes del Cuerpo Nacional de Policía, miembros de un dispositivo especial de vigilancia, que lo identificaron y procedieron a su detención. Los abogados del joven confirmaron anoche que su intención era entregarse en los juzgados.

Sánchez Burria, alias Sergio, estaba en busca y captura por orden de la Audiencia Nacional por su presunta vinculación con el comando Barcelona de ETA, donde supuestamente efectuó labores de apoyo logístico e información. El joven, celador en un hospital de Barcelona, estaba en paradero desconocido desde la detención de Iñaki Krutxaga y Lierni Armendariz, cuando ambos terroristas se dirigían a la sede de Correos de la capital catalana para colocar un coche bomba.

Los investigadores sospechan que el joven huyó tras ser avisado telefónicamente por Fernando García Jodrá, el etarra que escapó de Barcelona tras la caída de sus compañeros y que, antes de escapar, envió un nervioso mensaje telefónico a los ya detenidos. Sánchez Burria telefoneó al día siguiente a su centro laboral para advertir de que no iría a trabajar.

Este joven, hijo del responsable de la comisaría de Mataró, Atilano Sánchez -miembro de la promoción policial denominada Pablo Iglesias por su proximidad al PSOE- está considerado como una pieza fundamental para la entrada y asentamiento del comando. Diego Sánchez alquiló los dos pisos de que disponía la banda en Barcelona y efectuó tareas de seguimiento a algunas de la víctimas del comando, siempre según fuentes de la investigación. Concretamente, los citados medios han destacado la circunstancia de que muchas de las acciones terroristas de los últimos meses se han realizado en las proximidades de la vivienda de Sánchez, en una zona que el joven conocía bien.

Actividad independentista

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Antes de colaborar con la banda en Barcelona, Sánchez se había incorporado al grupo independentista radical Plataforma de Unitat d'Acció (PUA) a finales de 1996 y alcanzó responsabilidades de dirigente en 1997. Durante tres años, el joven participó activamente en la Plataforma de Solidaridad con Euskalherria y el grupo de apoyo a Benjamín Ramos, un joven catalán encarcelado por colaboración con banda armada.

La policía dice tener constancia de que en esa época Diego Sánchez participó en campamentos de Jarrai y acudió a varias celebraciones del Aberri Eguna. En 1998 fue detenido en Banyoles (Girona) por los Mossos d'Esquadra tras apedrear una comisaría y un coche patrulla de la policía autonómica. El 12 de octubre de 1999 participó en los disturbios del barrio de Sants y 'repartió artefactos pirotécnicos', según los informes policiales, entre los miembros de la Plataforma Antifascista.

A finales de 1999 se fue descolgando de los movimientos independentistas para integrarse muy poco después en la organización terrorista, según fuentes policiales, que ayer aún desconocían por quién fue captado. Dichas fuentes consideran que Diego Sánchez redujo su participación en actos reivindicativos 'porque ETA le ordenó que pasara desapercibido'.

La familia del joven está 'destrozada' desde que conoció la implicación de su hijo, según dijo el directtor general de la Policía, Juan Cotino, quien consideró 'una desgracia para cualquier familia el tener un hijo en ETA'.

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