Expediente a una empresa de Vic por vertidos de grasas orgánicas

La Junta de Residuos ha abierto un expediente sancionador a una empresa de Vic que produce materias primas para la industria cosmética por verter restos de grasas en un campo de la localidad de Santa Maria d'Oló, según confirmó el Departamento de Medio Ambiente. El alcalde de la localidad, Santi Montsech, denunció los hechos ante la Junta de Residuos, que los pasados meses de mayo y agosto tomó muestras de los restos y abrió un expediente sancionador a la empresa Coseufil SA por vertidos ilegales de residuos orgánicos líquidos de origen industrial.

La empresa expedientada se dedica a comprar a los curtidores de piel los restos cárnicos que se encuentran entre la piel y la carne de los animales y los transforma en grasas que luego vende a la industria cosmética. Este proceso genera unas grasas y restos líquidos que son, al parecer, los que se han vertido de forma irregular en una finca que compró el propietario de la empresa, Pere Rosell.

Montsech explicó que los vecinos de la localidad se quejaron de los fuertes olores que desprendía el campo y, después de comprobar que se estaba vertiendo algo a las tierras, el consistorio optó por denunciar los hechos ante la junta.

Comprar para verter

Según el alcalde de Santa Maria d'Oló, el propietario de la empresa, Pere Rosell, compró una finca en el término municipal de la localidad que registró a nombre de su hijo y en la que vierte regularmente los restos de grasas. Algunos vecinos han observado que camiones procedentes supuestamente de esa empresa llegan de noche a la finca y descargan los residuos, de los que se desconoce si son nocivos para la salud de las personas o contaminantes para el campo.

El Ayuntamiento de Santa Maria d'Oló ha comunicado los hechos al Consejo Comarcal del Bages y el consistorio de Oristà, que colinda con el primero y que se ve igualmente afectado por los olores, ha hecho lo mismo con su Consejo Comarcal, el de Osona, que explicó lo sucedido a la Junta de Residuos y al Departamento de Agricultura de la Generalitat.

Fuentes del Consejo Comarcal de Osona explicaron que esta entidad ya abrió otro expediente a la empresa a principios del pasado año por verter los residuos que genera al colector general de Vic que, a su vez, va a parar a la depuradora de aguas residuales.

La empresa, que no ha querido dar su versión de los hechos, no predepuraba las grasas y los barros que genera su actividad antes de verterlos al colector, lo que motivó la apertura del expediente, que aún no ha concluido.

La Junta de Residuos, además de notificar a la empresa que se ha iniciado un expediente sancionador contra ella, deberá determinar ahora si estos residuos son nocivos para las personas o para la tierra.