'Vacas locas' controladas
Desde el pasado mes de noviembre, Europa se ha visto metida en un enorme problema agrícola ocasionado por la amenaza de la encefalopatía espongiforme bovina o enfermedad de las vacas locas. (...) La enfermedad se ha extendido de forma evidente entre los animales y el incremento de los controles en las reses mayores de 30 meses, edad a la que los animales son más proclives a manifestar este mal: ha posibilitado el hallazgo de 150 vacas infectadas en Francia durante el pasado año. Este mismo año se han encontrado 19 casos en Bélgica, nueve en Alemania y otros más en Irlanda, Suiza y España. Estas cifras son, en parte, el resultado del aumento de la vigilancia, pero también demuestran que la prohibición de la Unión Europea de usar piensos que tuvieran restos de animales no mantuvo fuera de peligro a la cabaña europea. (...) La práctica de alimentar con harinas animales se adoptó por razones económicas en el pasado (...) pero sus consecuencias han sido terribles. No sólo se ha tenido que destruir casi totalmente la cabaña británica para controlar la epidemia, sino que también se ha dañado gravemente la confianza pública en la seguridad alimentaria. (...) Es discutible cómo deban hacer su trabajo los ganaderos, pero de hecho, el único beneficio seguro del furor existente va a ser que se va a poner una mayor atención sobre los métodos ganaderos, que deben basarse sobre la certeza de que no es natural dar residuos cárnicos a animales herbívoros. Es fundamental acabar con esta práctica no sólo en Europa, sino también en el resto del mundo, incluyendo EE UU. (...)
Nueva York, 12 de enero
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