18 meses de conflicto continuo
El enfrentamiento permanente con el Gobierno central y la escasa actividad del Gobierno autónomo han caracterizado los 16 meses de poder del GIL en Ceuta. Ni uno solo de los nueve ministros y altos cargos que han visitado la ciudad durante este tiempo han pisado el Parlamento y menos aún el despacho de su presidente.
Dos de las decisiones más importantes de Sampietro -la aprobación del Plan General de Ordenación Urbana y el nombramiento de la Autoridad Portuaria- se encuentran en pleitos judiciales por la oposición del Ministerio de Fomento. En el primer caso por la intención del Gobierno de limitar las competencias urbanísticas de Ceuta y Melilla, tras el escándado protagonizado por Jesús Gil y Gil en Marbella. En el segundo, porque Sampietro eligió para dirigir el pulmón económico de la ciudad a José Eladio González Ríos, primo de uno de sus vicepresidentes, parado de larga duración y receptor de un subsidio agrario por unas tierras que posee su familia en Ceuta, considerado muy poco preparado para ese puesto.
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