El TSJC acepta los recursos de IC-V contra el golf de Terrassa

El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha admitido a trámite los dos recursos contencioso administrativos que la agrupación comarcal de IC-V interpuso contra la construcción del campo de golf en Torrebonica y Can Bonvilar de Terrassa. En concreto, la formación ecosocialista ha presentado un contencioso administrativo contra la Declaración de Impacto Ambiental aprobada por el Departamento de Medio Ambiente de la Generalitat. El otro contencioso administrativo ha sido presentado contra la aprobación definitiva de la modificación puntual del Plan Especial de Protección de Caminos Históricos de Terrassa a su paso por la zona donde se ubicará el campo de golf, de 270 hectáreas.

Francisco Morales, miembro de la directiva comarcal de IC-V, consideró ayer de forma muy positiva la resolución del TSJC y apuntó que 'este paso es imprescindible para continuar el proceso dentro de la estrategia del partido, que pretende utilizar todos los instrumentos posibles contra la instalación del campo de golf'.

Morales añadió que después de la poca 'transparencia del proceso administrativo', IC-V confía en 'que en el ámbito judicial se produzca una actuación más imparcial' respecto a este tema. En este sentido, la formación ecosocialista tiene 'ciertas esperanzas' de que finalmente no se traslade el Real Club de Golf El Prat a Terrassa.

La directiva comarcal se reunirá este sábado en Terrassa para analizar la situación, después de que el TSJC haya admitido a trámite los dos recursos contencioso administrativos, y para preparar la estrategia de trabajo de los próximos meses. Después de esta reunión, los ecosocialistas tienen previsto realizar una visita a las fincas de Torrebonica y Can Bonvilar, donde se ubicará el campo de golf.

Aguas residuales

La Agencia Catalana del Agua (ACA) dio el visto bueno la semana pasada al consumo del agua del futuro club de golf y se resolvió de esta forma uno de los últimos escollos administrativo antes del inicio de las obras del campo de golf. El informe de la ACA explicaba que el club de golf deberá utilizar aguas residuales de la depuradora de Les Fonts-Terrassa y que deberá construir una planta desalinizadora para garantizar la calidad del agua, que le supondrá una inversión aproximada de 1.000 millones de pesetas.

Esta inversión se suma a los 5.000 millones de pesetas que el Real Club de Golf El Prat ha previsto para su traslado a Terrassa desde los terrenos actuales en el Prat de Llobregat, que se ven afectados por la ampliación del aeropuerto de El Prat.

Según anunciaron fuentes de este complejo deportivo, las obras de construcción del campo de golf de Terrassa podrían iniciarse los próximos meses de mayo o junio y finalizar durante el año 2002.