La cantaora Dolores Agujeta presenta su disco en Suristán

Dolores Agujeta, hija de Manuel Agujeta, nieta de Agujeta el Viejo, pertenece a una de esas familias gitanas que llevan lo jondo en la sangre. Desde niña ha vivido absolutamente sumergida en ambientes flamencos, y así es lógico pensar que no podía ser otra cosa que cantaora.

Lo ha sido siempre en realidad, pero ahora parece decidida a entregarse profesionalmente al cultivo de esa herencia familiar con la que se ha encontrado. El cante de los Agujeta viene directamente de Manuel Torre y rezuma por todos sus poros savia añeja y purísima. De momento, Dolores acaba de publicar su primer disco, que se titula con toda propiedad Hija del duende, donde canta los estilos más genuinos de los gitanos de Jerez -su tierra de nacimiento- y Cádiz: soleá por bulerías, siguiriyas, fandangos, martinetes, soleares, la malagueña de Enrique el Mellizo y bulerías.

Dolores presentará su disco esta noche en Suristán. Su cante será acompañado, como en el disco, por la guitarra de su hijo, un adolescente a quien llaman Agujeta Chico, y que excepcionalmente ha cambiado el cante familiar por el toque. Dolores es, que sepamos, la única mujer que ejerce el arte de una larga familia de hombres. Pero ese canto esencialmente viril, incluso bronco, ella lo traslada a su voz de mujer en cascada sin que pierda una ápice de su rajo y su jondura.

El baile tiene su lugar natural esta semana en Casa Patas, donde desde el lunes está actuando la pareja María Montero y Fernando Alfaro. Hoy podrá vérseles a las 22.30, y el viernes y el sábado, en las sesiones de las 21.00. Les acompaña un destacado grupo de profesionales, en el que figuran Jorge Rodríguez y Jesús Montoya, a las guitarras; Antonio Santiago, al cante, y Rafael Serrano, a la percusión.

Dolores Agujeta, hoy, a las 22.30, en Suristán (Cruz, 7; metro Sol), 1.000 pesetas. María Montero y Fernando Alfaro, hoy, 22.30, 2.500 pesetas; viernes y sábado, 21.00, 3.000 pesetas; en Casa Patas (Cañizares, 10; metro Antón Martín).