Un 'proyecto en blanco', según las grandes industrias consumidoras

Las alegaciones de la Asociación de Empresas con Gran Consumo de Energía Eléctrica (AEGE), presentadas el pasado 27 de diciembre al TDC, tienen muchos puntos de coincidencia con las de Repsol. Su conclusión final es la misma: estima que el tribunal 'no puede emitir el informe al no contar con el proyecto de desinversión concreto' y, consecuentemente, suplica, que se archive el expediente o se suspenda la tramitación del procedimiento hasta que Endesa e Iberdrola remitan ese plan.

De no estimarse esta petición, se insta a que, 'con carácter subsidiario', se emita un dictamen en el que se advierta la ilegalidad de la fusión o, en último término, se reconozca que la operación 'restringe muy gravemente la competencia efectiva en todos los mercados relevantes definidos sin que sea apreciable que aporte ninguna mejora de los sistemas de producción, o comercialización, fomente el progreso técnico o económico o mejore en modo alguno la competitividad internacional de la industria nacional o los intereses de los consumidores o usuarios'.

En su escrito, la AEGE estima que la fusión es un 'proyecto en blanco' que 'vulnera de manera frontal' la ley, 'por lo que su realización supondría un acto ilegal y, por consiguiente, nulo'.

Las empresas de la AEGE serán unas de las más afectadas por el desenlace de la fusión. No en vano esta asociación se fundó en 1980 con el objetivo básico de representar los intereses de las compañías con consumo intensivo de energía eléctrica, que, en su conjunto, representan el 15% del total nacional. Entre los 43 socios de la AEGE hay cementeras (Asland, Alfa, Valenciana), firmas de gas (Air Liquide, Carburos), metalúrgicas (Alcoa, Inespal), siderúrgicas (Aceralia, Acerinox, Tubacex y Global Steel)...

En el voluminoso expediente C60/00, que hace referencia a la fusión, se han incluido también las alegaciones y sugerencias de otras empresas como Unión Fenosa, Aes Corporation, Enron, Hidrocantábrico, y otras instancias como la patronal del sector Unesa o las asociaciones de consumidores.

Accionistas minoritarios

Entre la documentación aportada figura la de un grupo de accionistas minoritarios de Iberdrola, que, en su escrito de alegaciones, considera la operación dentro de la 'estrategia diseñada por Manuel Pizarro [nominado como presidente de la sociedad fusionada] para el PP a fin de controlar la totalidad de las empresas y sectores económicos más importantes de España'. Estos accionistas no dejan pasar la oportunidad de criticar al Gobierno por 'colocar a sus hombres' al frente de las empresas privatizadas.

Este grupo reseña especialmente el rechazo por parte del presidente de Iberdrola, José María de Oriol, de la contraoferta presentada por Gas Natural, lo que, a su juicio, confirma la teoría de que la operación responde a intereses políticos.