Salvem acusa al Consell de usar la ley a su antojo

La plataforma vecinal Salvem El Cabanyal-Canyamelar, la entidad que más se ha opuesto al plan municipal, acusó ayer al Consell, representado por la Consejería de Cultura, de 'hacer una ley para aplicarla con trampa', en referencia a la Ley de Patrimonio aprobada por la Generalitat en 1998. 'Se arrepienten de las leyes que aprueban cuando no les interesa', añade la nota informativa.

La plataforma insiste en que la resolución de Cultura es 'política' y 'de encargo', subraya que la subsecretaria de la consejería 'no tiene competencias ni cualificación profesional' y pregunta desde cuándo se tenía redactada la resolución ya que los informes periciales en que se basa (cinco) se entregaron a la consejería el pasado miércoles. Además, critica lo que considera 'medias verdades, falacias y peor que mentiras completas', al tiempo que asegura que no 'se pueden sustituir tramas existentes (paralelas al mar) por otras nuevas (perpendiculares)'. También denuncia las argucias para desacreditar informes aportados por Salvem, como el de la junta de gobierno de la Facultad de Derecho, y anuncia que continuará 'luchando' contra el proyecto municipal. La Asociación de Vecinos de El Cabanyal-Canyamelar sostuvo que la resolución carece de 'credibilidad' y calificó de increíble que se haya emitido un informe con un día de tiempo.

También los concejales de PSPV y EU, Rafael Rubio y Manuel Ibáñez, respectivamente, fueron muy críticos con la resolución. Rubio la tildó de 'política', afirmó que el plan supone una 'destroza' del barrio y lamentó que no se consensuara un proyecto de tanta importancia. Ibáñez señaló que Cultura se 'ha plegado a los intereses irracionales' de Barberá y sostuvo que partir en dos el barrio es un 'desatino' que beneficia a la especulación.

Por otra parte, el secretario del Consell Valencià de Cultura, José María Morera, lamentó ayer que el Ayuntamiento no se dirigiera al organismo consultivo para informar sobre un plan que afecta a un barrio declarado BIC con el informe favorable del CVC.

Tras el visto bueno de la Consejería de Cultura, el plan municipal volverá al pleno del Ayuntamiento y posteriormente se someterá a la resolución de la Consejería de Obras Públicas, cuyos responsables se han manifestado favorables al proyecto, según la alcaldesa.