Guión abierto para un embrollo presidencial

Más de un mes después de las elecciones presidenciales, la partida por la Casa Blanca está de nuevo en la casilla de salida. Si el Supremo de Estados Unidos no revoca la sentencia dictada por su homólogo de Florida, éstos son los guiones posibles: - Florida escoge sus 25 compromisarios en el Colegio Electoral. El martes, día 12, vence el plazo. Si continúan los recuentos manuales, Gore puede resultar ganador. El Supremo de Florida ordenaría a Katherine Harris, secretaria de Estado, certificar la victoria del demócrata y concederle los 25 compromisarios. El Legislativo de Florida, de mayoría republicana, se rebelaría y concedería a Bush su propio grupo de 25 compromisarios.

- Se reúne en Washington el Colegio Electoral. El próximo 18, el Colegio Electoral se encontraría con dos grupos enviados por Florida. Ante el conflicto, la representación de Florida podría ser anulada. Gore se quedaría con una mayoría de 267 compromisarios frente a 246 de Bush. Los demócratas argumentarían que eso es suficiente para que Gore sea presidente. Los republicanos afirmarían que se requiere la mayoría del total de los 538 compromisarios convocados, o sea, la cifra mágica de 270. Esta discusión podría ser llevada al Tribunal Supremo de EE UU.

- Entra en acción el Congreso de Estados Unidos. El 5 o el 6 de enero se reúne en Washington el Congreso para certificar la decisión del Colegio Electoral. Si prosigue la disputa, las dos Cámaras debaten por separado. Los republicanos tienen una corta mayoría, 221 frente a 214, en la Cámara de Representantes. Pero si Gore ha sido proclamado ganador del voto popular en Florida, es posible que algunos republicanos no quieran negarle la Casa Blanca. Demócratas y republicanos están igualados a 50 en el Senado, pero el voto de desempate lo tiene Gore, todavía vicepresidente.

- El Congreso elige directamente al presidente. Si las dos Cámaras no alcanzan por separado una misma decisión, la Constitución les otorga la posibilidad de nombrar directamente a la pareja al frente del Ejecutivo. La Cámara de Representantes, de mayoría republicana, designaría al presidente. Esa votación se efectuaría por delegaciones estatales. Los republicanos tienen mayoría en 28 de las 50 delegaciones. Ganaría Bush, si todos sus correligionarios le siguen. El Senado elegiría al vicepresidente, que podría ser el demócrata Joe Lieberman.

- Vuelve a intervenir el Supremo de EE UU. Cabe la posibilidad de que la parte perdedora en el Congreso recurra ante el Supremo.

- Toma de posesión. El 20 de enero Clinton cede la Casa Blanca a su sucesor. Si éste no está claro, accede provisionalmente al Despacho Oval el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Dennis Hastert, o, en su defecto, el más viejo del Senado, el casi centenario Strom Thurmond.