Tradia alquila a Voltor la red que distribuye la señal de TV-3 en Mallorca
Tradia se ha instalado en Mallorca y ha comenzado la expansión de sus negocios de telecomunicaciones en Baleares mediante la toma de control del centro de emisiones del monte de Alfàbia -creado por suscripción popular en los años ochenta-, desde donde se distribuye la señal de las televisiones y radios públicas en catalán, así como de dos estaciones de televisión isleñas.La compañía Tradia, nacida como Difusión Digital al privatizarse la red de enlances y emisoras de la Generalitat y de TV-3, ha alquilado el uso en exclusiva -por 15 años- del poste mallorquín de comunicaciones, que fue levantado por la entidad cívica Voltor y la Obra Cultural Balear, gracias a las campañas de donativos de centenares de ciudadanos y a las reiteradas ayudas institucionales, por el deseo de recibir programas en catalán y poder captar las retransmisiones futbolísticas del Barça.
Joaquim Pujol, presidente de Tradia, aseguró ayer en Palma de Mallorca que su firma asegurará la recepción de los canales actuales y mejorará la calidad de las emisiones, al tiempo que reconoció su interés en comercializar sus servicios múltiples de transporte de señal y lograr sumar como cliente al actual Gobierno de Baleares.
Tradia, con la complicidad de Voltor, ha ganado por la mano a la actual mayoría autonómica gubernamental balear, que intentó adquirir el centro emisor de Alfàbia, sin llegar a un acuerdo con la asociación cultural titular, cuya gestión dominan Antoni Mir y Matías Oliver, bajo la presidencia del letrado Ferran Gomila. Tradia pagará una decena de millones al año a Voltor por ocupar el solar y usar las instalaciones.
"Voltor tiene una trayectoria histórica y una legitimidad moral", aseguró Mir, mientras que Pujol situó el acuerdo "en una confluencia de intereses". Ambos grupos evaluaron también su "proximidad cultural".
En la última época del PP, el Ejecutivo balear trazó un plan para asumir la propiedad y control de los postes reemisores de Voltor, pero sólo en el caso de las antenas de las islas de Menorca, Ibiza y Formentera se consumó la intervención pública. Ahora Tradia ha ofrecido al Ejecutivo un plan evaluado en 2.500 millones de pesetas para extender una red de 30 puntos emisores distintos para el archipiélago. Telefónica, Retevisión y France Telecom compiten por lograr la extensión de la posible red pública de difusión de señales digitales.
En el plan estratégico del Gobierno de Baleares se contempla la eventual puesta en marcha de una televisión autonómica a partir del año 2002.
"Existe una voluntad total y absoluta de colaborar con el Gobierno balear", reseñó Pujol. El convenio Tradia-Voltor -cuyo contenido íntegro no fue dado a conocer- contempla la existencia de comisiones de seguimiento para conocer el desarrollo de inversiones y actividades del negocio "que no vayan en contra del espíritu fundacional".
La mayorista digital catalana controlada por Acesa será dentro de 12 meses "100% privada, ya que la Generalitat (que retiene el 13% del capital) no tiene interés en seguir como socio; su participación se extinguirá en el plazo de un año", explicó ayer Joaquim Pujol, quien detalló que el plan de expansión de la empresa por toda España, con una inversión de 60.000 millones de pesetas, requerirá ampliaciones de capital.
