Zagallo pierde los nervios en el Parlamento brasileño

El viejo Mario Zagallo es una institución del fútbol brasileño. Pero tuvo que dejar de dirigir a la selección nacional tras la derrota (0-3) en París, contra Francia, en la final de la Copa del Mundo de 1998. Tampoco habría imaginado nunca que el misterio que rodeó aquel partido, tras la indisposición horas antes del mismo del delantero Ronaldo, el astro de su equipo, le originaría un gran sofoco ante el Parlamento de su país, al que ha sido convocado ahora para declarar ante la comisión que investiga la corrupción existente en el fútbol.Zagallo fue interrogado durante cuatro horas y durante ellas perdió los nervios, gritó y gesticuló hasta congestionarse. El presidente de la citada comisión, el diputado Aldo Rebelo, llegó a cerrarle el micrófono para que no siguiera hablando cuando no le correspondía el turno.

La comisión quería saber si había sido la multinacional Nike la que había forzado al entonces entrenador de la selección a obligar a jugar a Ronaldo tras la crisis nerviosa que lo había zarandeado horas antes del decisivo encuentro.

Zagallo, hoy entrenador del Vasco de Gama, lo negó todo. "¿Qué habrían hecho de mí si no hubiese dejado jugar a Ronaldo y Brasil hubiera perdido? Me habrían linchado", exclamó.

Pero los dos ex médicos de la selección lo pusieron en un brete. Interrogado Zagallo sobre cuándo había sabido que Ronaldo estaba indispuesto, respondió que momentos antes del encuentro. Los facultativos aseguraron, sin embargo, que le habían informado a las dos de la tarde, inmediatamente después de que surgiera el presunto problema. Porque, además, según éstos, la crisis "nunca existió". Luego el misterio sigue.

Rebelo acusó tambien a Zagallo de haber firmado un documento de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBT) para impedir que se creara la citada comisión que indaga sobre la corrupción futbolística. Ante la negación de Zagallo, un diputado presentó el papel con la firma del ex seleccionador. Ante la evidencia, Zagallo se defendió: "Yo no sabía que ese documento iba a ser usado para intentar evitar la creación de la comisión".

En un momento de fuerte tensión, mientras gritaba, otro diputado advirtió a Zagallo: "Se ha olvidado de que aquí no está en el banquillo de la selección, al borde del campo, sino en el Parlamento, en el que no necesita gritar".