De miembro del 'comando Araba' a jefe de los 'ilegales'

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Félix Alberto López de Lacalle, Mobutu, nació en Vitoria hace 40 años y pertenece a ETA desde los primeros años de la democracia en España, según la policía. Fue uno de los dirigentes de la banda terrorista que accedió a la cúpula de la organización tras la detención del colectivo Artapalo en Bidart (Francia) en marzo de 1992. No duró demasiado en sus nuevas funciones porque fue detenido en territorio francés el 17 de noviembre de 1994. En ese momento pesaban sobre él dos órdenes de búsqueda y captura, una de ellas por asesinato y pertenencia a banda armada en relación al atentado mortal contra el comerciante Saturnino Sota, cometido en Vitoria en 1978. La fiscalía desestimó en 1994 pedir la extradición por ese sumario.

En agosto de 1979 se marchó a Bélgica y un año más tarde a Yemen del Sur, donde recibió junto a otros miembros de ETA un cursillo de adiestramiento guerrillero, informa Vasco Press. Las informaciones policiales le implican en las actividades del comando Araba hasta que en diciembre de 1981 huyó nuevamente, esta vez a Francia, tras la muerte de un miembro de ese grupo etarra en un enfrentamiento a tiros con la policía.

Ya desde territorio francés Mobutu sirvió de enlace entre la dirección de la organización terrorista y los grupos de reserva, hasta que fue detenida la cúpula etarra en la localidad vascofrancesa de Bidart. A partir de entonces se convirtió en el responsable de los comandos ilegales (fichados por la policía). El miembro del comando Barcelona y ex parlamentario de Herri Batasuna Felipe San Epifanio, Pipe, declaró tras su detención que López de Lacalle había sido el dirigente de ETA que le había propuesto encuadrarse en el grupo etarra destacado en la capital catalana y le había dado las instrucciones para actuar allí en 1993.