Bush se adjudica Nuevo México y Gore se queda con Oregón

Por tan sólo 17 votos de diferencia, George Bush se habría atribuido finalmente Nuevo México, un Estado en el que en un principio se había dado por ganador a Al Gore, según datos todavía por confirmar. El recuento de los 67.000 votos en el condado de Bernalillo otorgaron finalmente la victoria al candidato conservador. Gore se queda, sin embargo, con Oregón por un margen más holgado, de 5.973 votos. Ninguno de estos dos Estados tiene suficientes votos electorales para compensar la pérdida de Florida. La sorpresa fue mayúscula. Antes del recuento de San Bernalillo, Gore lideraba por 10.000 votos, por lo que incluyó este Estado y sus cinco votos electorales en el campo demócrata. Al final Bush sacó 285.764 votos y Gore 285.747. Los resultados oficiales no se conocerán, sin embargo, hasta la semana que viene, porque quedan 189 papeletas por contabilizar (de personas que mandaron su voto por correo pero al final eligieron acercarse hasta las urnas), una cifra que podría cambiar de nuevo el nombre del ganador.

"Lo único que puedo decir es ¡viva Bush!", dijo el gobernador republicano de Nuevo México, John Dendha, que también quiso recordar que los resultados no eran definitivos.

Oregón, el Estado que con Florida no pudo anunciar sus resultados en la noche electoral, al no sacar un claro ganador, se queda en manos de Gore por una ventaja de 5.973 votos frente a Bush, tras completarse el 99% del escrutinio de los sufragios.

Las cifras de la agencia Associated Press han establecido la diferencia entre los dos candidatos en el 0,4%. Según las leyes de este Estado, si el margen es inferior al 0,2%, debe llevarse a cabo un nuevo recuento de los votos. Y quedan 28.500 por contabilizar. Oregón suma siete colegios electorales. Los resultados oficiales no se sabrán hasta el próximo 27 de noviembre.

Tras los nuevos resultados de Nuevo México y Oregón, Gore queda con 262 votos electorales, y Bush, con 251.