"Ni 40 millones de balas van a poder con nuestra dignidad"

El manifiesto leído anoche en la Puerta del Sol de Madrid por el secretario general de la Asociación Víctimas del Terrorismo, Luis Delgado, fue un alegato por la continuidad de la repulsa a ETA en la vida cotidiana y no sólo en las movilizaciones después de cada atentado, además de una condena explícita de las actitudes tibias frente al terrorismo. "Debemos ser militantes activos contra el terrorismo y esa militancia hay que dejar constancia día a día en todos los entornos que nos son próximos. Nadie que nos conozca debe albergar ninguna duda de cuál es nuestra actitud frente al terrorismo", leyó Delgado. "Quien no está frente a ETA con determinación y sin ningún tipo de matices no es de los nuestros", sentenció para luego aludir implícitamente a la actuación del PNV: "Quienes no se avergüencen de de sentarse en la misma mesa que los que amparan a estos miserables, quienes suscriben pactos con ellos, quienes no son capaces de rechazar cualquier tipo de ventaja derivada de la existencia de una banda terrorista están defraudando definitivamnete las aspiraciones de un pueblo que se merece vivir en libertad y democracia".Las víctimas "no nos sentimos culpables porque los responsables de tanta iniquidad son los terroristas quienes tienen que cambiar. Y nos veremos obligados a insistir una y otra vez hasta que entiendan que son ellos lo equivocados", había dicho poco antes.

"Repetimos consignas contra el terrorismo, pedimos la unidad de los demócratas, contundencia y rigor en la aplicación de la ley... Son cuestiones en las que todos estamos de acuerdo y tenemos la esperanza de que se traduzcan en hechos que nos ayuden a avanzar hacia el final de esta pesadilla que dura ya más de tres décadas". Se refirió luego al desprecio de los terroristas por las "vías de expresión amplias y generosas" de que dota el sistema democrático al pueblo español.

"No tenemos que revisar ninguno de nuestros postulados aunque insistan con acciones asesinas como las que ayer [por el lunes] ensombrecieron nuestros rostros. Seguiremos firmes en la defensa de la convivencia pacífica y pese a los terribles embates que tengamos que soportar no nos flaquearán las fuerzas. Seremos libres porque ni cuarenta millones de balas van a poder con nuestra dignidad", concluyó.