El brasileño está de vuelta

El gran Rivaldo está de vuelta. La crisis goleadora que le atenazó en los primeros partidos de la temporada está superada. El delantero brasileño llevaba dos goles en la Liga antes de afrontar el partido de Anoeta el pasado sábado. Pero a aquella sequía le ha seguido una auténtica explosión: cinco goles en sólo dos partidos. El retorno de Rivaldo se produce en el mejor momento, cuando el Barça está decidiendo su futuro en la Liga de Campeones, y justo antes de que el próximo sábado el Real Madrid visite el Camp Nou.La racha se inició frente a la Real Sociedad y coincidió con el reencuentro del Barça con su mejor línea de juego. Rivaldo parece haberse convertido en un termómetro para sus compañeros: si él funciona, el resto del equipo también. Así ocurrió en Anoeta, donde los azulgrana rehabilitaron su imagen con una goleada por 6-0, en la que Rivaldo aportó dos goles. Y así volvió a repetirse en San Siro.

Los tres goles de ayer permitieron a Rivaldo enterrar los resquemores causados por su polémica marcha a Brasil. "Si no me quieren me marcho, y sin cobrar nada", amenazó entonces. Ayer, su discurso fue otro. "Yo siempre soy feliz", respondió a la pregunta de si a partir de ahora quedarían olvidados sus problemas con la afición. "Lo que a mí me gusta es jugar al fútbol. Si juego mal que me critiquen, eso no me importa; pero que no lo hagan por culpa del dinero. Eso no tiene nada que ver con lo que ocurre en el campo".

El azulgrana lamentó no haber marcado el cuarto gol, cuando Sergi le centró un balón que remató de cabeza y salió alto en los últimos minutos. "Mala suerte, si hubiera entrado lo habríamos celebrado de forma más efusiva que los demás". El delantero atribuyó el primer gol del Milan al hecho de que el Barça se quedó sin Cocu y Petit cuando ambos tuvieron que abandonar el campo, lesionados. "Entonces éramos 9 contra 11, y de ahí salió el gol del empate. Fue un momento delicado, difícil".

Llorenç Serra Ferrer realizó una argumentada defensa del jugador brasileño. "No tengo ninguna duda de la calidad del jugador", señaló el técnico mallorquín. "Pero como he dicho en otras ocasiones es un ser humano y es normal que en algún partido no le salgan las cosas como él quiere. Pero me identifico mucho con él y me alegro por sus tres tantos".

Serra Ferrer desmintió que al brasileño le faltara emotividad en la celebración de sus goles. En Anoeta, apenas levantó el brazo cuando marcó sus dos tantos. "Sí los ha celebrado", comentó el técnico. "En el vestuario se ha abrazado a sus compañeros. Es un profesional con mucha experiencia. Ha marcado tres, y con suerte podía haber logrado más".

La imagen que ofreció Rivaldo al final del partido de San Siro anuló la de crispación que había mostrado hace sólo unas semanas. Rivaldo estaba satisfecho por su actuación y porque las cosas vuelven a funcionarle. Pero habló más del equipo que de sí mismo: "Jugamos un buen partido y pudimos conseguir la victoria. Ahora dependemos de nosotros mismos y el martes vamos ganar en el campo del Leeds".

"A pesar de las adversidades, hemos sacado buena nota". Sólo un último gol de Rivaldo, el de la victoria, hubiese contentado más a Llorenç Serra Ferrer, informa Daniel Martínez. Pero el técnico del Barça consideró que un empate a tres en Milán no estaba nada mal. "Acudir a un campo como el del Milan y marcar tres goles es muy importante. No es tarea fácil", dijo visiblemente contento. Serra Ferrer pensaba tanto en las consecuencias inmediatas que el resultado tenía para el Barça en la Liga de Campeones -"de nuevo, dependemos de nosotros; si ganamos los dos próximos partidos, estaremos clasificados para la siguiente ronda", apuntó saludando el empate del Leeds- como en las futuras; es decir, en el partido del sábado contra el Madrid. "Un resultado así refuerza la confianza", aseveró.

El técnico azulgrana, satisfecho por el juego deplegado por sus jugadores, alabó también el espíritu de sus hombres. "Estoy contento porque los jugadores han sabido superar la adversidad. Algunos han salido al campo sin apenas calentar. Son circunstancias que endurecen al equipo", apuntó. Se refería Serra Ferrer al imprevisto al que el Barça hubo de sobreponerse cuando Petit resultó lesionado en un choque con Cocu. "Fue una circunstancia adversa y muy negativa, justo cuando controlábamos el partido", expuso. Y añadió: "Estoy convencido de que el resultado no sería 3-3 si no hubiera pasado esto".

Pero el empate tampoco disgustó al técnico barcelonista. Serra Ferrer lo acogió como un resultado justo. "Cualquiera de los dos hubiera podido ganar", admitió, "de modo que es un resultado justo". El técnico, en cambio, criticó el estado del césped de San Siro.