"Con Cúper juega quien está mejor"

Juan Sánchez, de 28 años, fue uno de esos niños que rompía lámparas a balonazos en el pequeño piso de sus padres, en la localidad valenciana de Aldaia. Luego pasó a coleccionar goles a porrillo allá donde jugara, un año tras otro. En el Mestalla, ya en Tercera División, marcó en una temporada 37 tantos. Llegó al Valencia con 11 años y nueve años después debutó en Primera de la mano de Guus Hiddink. Tiene el instinto que le permite sobrevivir tanto tiempo en el área contraria pese a sus 172 centímetros de altura. Sánchez viene compartiendo la titularidad con unos y con otros, puesto que le ha presentado a Cúper un aval irrechazable: seis goles en cinco partidos de Liga.Pregunta. Hace un mes no contaba para nadie. Ahora es el pichichi de la Liga. ¿Cómo se explica?

Respuesta. Siempre pensé que tenía un sitio en este equipo. Confío mucho en mis posibilidades. Las temporadas son largas y al final siempre participo en muchos partidos.

P. Curiosa la pareja que forma en el ataque con el gigantón Carew. ¿Beneficia a su juego tener a alguien tan corpulento a su lado?

R. Carew ha mejorado mucho desde que llegó a España. Está aprovechando su corpulencia, va muy bien en el juego aéreo, aguanta el balón y nos da facilidades a la gente que venimos desde atrás.

P. En el inicio de Liga, ante el Madrid en el Bernabéu, Cúper le sustituyó al final del encuentro a pesar de que usted había entrado a jugar tras el descanso. Eso duele.

R. Sí, pero tenía una explicación táctica: el entrenador quiso que entrara Carew para ver si remataba de cabeza algún centro. En ese partido me di cuenta que tenía un puesto en el equipo. En el Valencia nadie se puede dormir, hay mucha competencia y juega el que está mejor.

P. ¿Cuál de los nuevos fichajes del Valencia le ha sorprendido?

R. Vicente. Es muy bueno. Va a ser una de las revelaciones del campeonato. Zahovic también tiene mucha calidad.

P. Usted ha sido una vez internacional, hace año y medio en Salerno en un amistoso ante Italia (2-2). Espera que se repita, claro.

R. De ese día lo tengo todo guardado como recuerdo: el pantalón, la camiseta, .... Fue muy bonito. Llegar hasta ahí ya es muy difícil, pero es verdad que ahora tengo más posibilidades de que se repita.