El Consejo Social de la Jaume I matiza la opinión de su presidente

Tras una reunión del Consejo Social de la Universidad Jaume I (UJI) celebrada ayer, el presidente del organismo, Rafael Benavent, matizó su idea de que la universidad debería arrimarse al "color político" que gobierna Castellón, como dijo el lunes tras la inauguración del curso académico. Benavent quiso ayer "recordar" que "esta empresa [en referencia a la Universidad], que es una de las más grandes de la provincia, se surte de los impuestos que paga la sociedad". Benavent añadió: "Quizá somos un poco demasiado exigentes y pensamos que la Universidad debería dar más a la sociedad". En un comunicado, el Consejo Social dedica varios párrafos a destacar la intensidad de la relación entre la universidad y la sociedad. "Con el objeto de conseguir una fuerte conexión social, hemos llevado a cabo iniciativas que en muchos casos son pioneras"; "...refleja una fuerte conexión con el entorno socioeconómico, con una compleja y costosa gestión con la que pocas universidades se atreven", son algunas de las expresiones en este sentido. El escrito, sin entrar en el carácter político al que hizo referencia Benavent, quiere hacer constar que la relación es permanente e intensa.

La respuesta ha sido unánime tanto por parte de varios integrantes del Consejo Social como por parte de colectivos ajenos a él. El parlamentario socialista y también miembro de este consejo Daniel Gozalbo calificó las declaraciones del lunes de Benavent de "lamentables, injustas y equivocadas". "Él habla de color político y actúa desde un color político", afirmó Gozalbo. Por su parte, el diputado provincial del Bloc Nacionalista Valencià, Antoni Porcar, indicó que la idea del presidente del Consejo Social es que "la universidad ha de estar bajo el servilismo de los políticos, sea cual sea su color". Por último, CC OO, que ha calificado las declaraciones de "lamentables", considera que las mismas se inscriben en el clima preelectoral que vivirá la universidad "en el que la derecha empleará todos sus medios para tratar de tener una Jaume I dócil, sumisa y controlada".