Puig afronta el debate de política general el miércoles en representación de la nueva ejecutiva

El calendario parlamentario fija para el próximo miércoles el primer debate de política general de la presente legislatura, una cita que supondrá el precipitado estreno de Joaquim Puig como portavoz parlamentario. El Grupo Socialista de las Cortes será presidido por Jesús Ros, alcalde de Torrent, que sustituirá a Josep Sanus, mientras que Antonio Moreno se dedicará en exclusiva a la vicepresidencia de la Cámara. La negociación de la composición de la Acadèmia Valenciana de la Llengua o la posición del partido en torno al Plan Hidrológico Nacional son otros retos inmediatos de la nueva ejecutiva.

Joaquim Puig, alcalde de Morella y responsable de la secretaría de Política Institucional en la ejecutiva refrendada ayer por el congreso de los socialistas valencianos, dará la réplica a Eduardo Zaplana en el pleno de las Cortes Valencianas convocado para el próximo miércoles. La reorganización del grupo parlamentario libera a Moreno de la incómoda posición que ha ocupado hasta la fecha, a caballo entre su responsabilidad como vicepresidente segundo del Parlamento autonómico y portavoz del Grupo Socialista. El relevo de Moreno era previsible y el Grupo Socialista había trazado las líneas maestras del debate en equipo, pero Puig apenas tendrá tiempo para marcar la impronta de la nueva ejecutiva nacional.Otro de los relevos en el seno del grupo parlamentario viene obligado por la renuncia de Josep Sanus, ex alcalde de Alcoy, quien dejó el cargo hace apenas dos semanas. Está previsto que Jesús Ros, alcalde de Torrent, asuma el cargo si es refrendado por el grupo parlamentario. El ascenso de Ros se interpreta como una concesión a los delegados vinculados al Movimiento por el Cambio que han sido excluidos de todos los órganos de gobierno del partido.

La negociación sobre la composición de la Acadèmia Valenciana de la Llengua, pendiente desde hace dos años, es uno de los primeros retos de la nueva ejecutiva, que ha situado a Isabel Escudero como responsable de la secretaría de Cultura y Política Lingüística. El propio Joan Ignasi Pla, secretario general, ha exigido la pronta solución de una polémica "generada y utilizada por la derecha".

La posición del partido sobre el PHN es otro de los retos inmediatos de la ejecutiva del PSPV, aunque José Luis Rodríguez Zapatero, secretario general del PSOE, elevó el problema al ámbito estatal. En rueda de prensa momentos antes de la clausura del congreso Zapatero comentó que el PHN "ni es plan, ni es hidrológico, ni es nacional" porque el Gobierno se ha limitado a lanzar una propuesta sin haber hecho antes los deberes. "El Plan Hidrológico Nacional debería haberse pactado con todas las comunidades autónomas antes de presentarse", dijo Zapatero, quien aprovechó la ocasión para recordar cómo José María Aznar se opuso al proyecto en 1993.

El dirigente socialista recriminó a Aznar sus cambios de postura debidos a estrictos intereses coyunturales y negó posiciones divergentes al respecto en el seno del PSOE. "Cuando el Gobierno pide coherencia a la oposición es porque está inseguro", concluyó.