Polémica de ídolos
Lewis y Johnson disienten sobre los cinco oros que pretende Jones
"A Marion Jones no deberían presionarla tanto para lograr cinco oros en Sydney". Lo dice Carl Lewis, uno de los mejores atletas de todos los tiempos, que ganó cuatro oros en Los Angeles 84 y nueve en total. Otro de los grandes, Michael Johnson, rey absoluto de los 400 metros y de la elegancia al correr, disiente: "Marion necesita nuevos retos, y yo la aplaudo". Mientras tanto, la reina de la velocidad anhela "que llegue el viernes" para el intento de alcanzar lo que ninguna atleta ha conseguido."No es bueno que su gente le haya puesto en esa situación, teniendo que correr los dos relevos", manifestó Lewis en alusión al ambicioso objetivo de la estadounidense: los títulos olímpicos de 100, 200, longitud, 4x100 y 4x400 metros. Y explicó que conseguir cuatro medallas de oro en Los Angeles "fue bastante más fácil" para él. "Era en una ciudad que conocía muy bien, en la que llegábamos en coche al estadio, algo muy distinto a Barcelona 92 y Seúl 88".
Johnson mostró ayer un desacuerdo absoluto: "Entiendo que la gente ajena al atletismo opine que la pretensión de Marion es una locura. Pero todos los atletas sabemos que no es así. Ella gana todo lo que corre, y debe plantearse metas cercanas a lo imposible. Es bueno para ella y para el atletismo", dijo el número uno de los 400 metros, quien intentará bajar en Sydney de los 43 segundos, algo poco menos que imposible hasta hace unos años, "si el clima es favorable".
Preguntados por las posibilidades de Jones, Johnson y Lewis fueron como el agua y el vino: "Este desafío implica una gran presión externa, pero ella está muy bien asesorada, y creo que también estará preparada para soportarla, dijo Johnson. "No quiero meterle más presión. Ya tiene bastante con la que produce su entorno", concluyó Lewis.
Jones se mostró harta de que le critiquen sus carencias técnicas en el salto de longitud, y muy segura de su capacidad: "Estoy en el mejor momento de mi vida. Mi cuerpo está preparado. Y espero que mi mente también, especialmente para la presión del último día, en el 4x400. Ésa es la incógnita más interesante, junto a los intervalos muy cortos que tendré varias veces entre dos pruebas. Nadie me va a quitar el sueño de las cinco medallas. No importa quién lo diga", agregó, en referencia a Lewis.