Pendientes del diálogo con el Gobierno

"No vamos a dejar que termine la legislatura sin volver a proponer la ley de Comarcas", con esta frase apuntó el responsable de Comunicación del PA, Javier Aroca, uno de los objetivos de su grupo para la nueva etapa. Según el PA, el desorden territorial de Andalucía, ya sea en el trazado del mapa como en el diseño de su organización política, está causando graves problemas a la vertebración de la comunidad. Los andalucistas creen que las diputaciones son organismos a desaparecer por su carácter "obsoleto y clientelar", que merman la autoridad de la Junta para el marcarlas pautas territoriales, y por tanto, la propia autonomía. El PA quiere también que el Ejecutivo autonómico adopte posturas más "firmes y asentadas" en su relación con Europa, el Magreb y el Mediterráneo, aumentado la interlocución con Bruselas. "Andalucía debe aclarar su papel como enclave fronterizo", sostiene Aroca.

Izquierda Unida tratará de imprimir un fuerte dinamismo a la política andaluza, tanto al Gobierno como al Parlamento, una vez superada la resaca electoral del pasado 12 de marzo. El coordinador de IU, Antonio Romero, aventuró que si el Gobierno autonómico "no reacciona, no terminará esta legislatura, tan sólo llegará a las elecciones locales". "El Ejecutivo es débil y está agrietado", agregó.Romero dijo que su grupo vigilará muy de cerca los presupuesto andaluces de 2000, que rozarán los tres billones de pesetas y serán decisivos para la vertebración de la comunidad. La propuesta estrella de IU en este sentido es la creación de un fondo especial de solidaridad, que corrija los desequilibrios territoriales en nivel de renta, población, infraestructuras y servicios esenciales. Romero también ha pedido a Manuel Chaves una reunión periódica con los dirigentes de todos los partidos.

El Partido Popular cree que hay tres cuestiones fundamentales a tratar en los próximos meses: buscar una salida a la ley de Cajas, el Pacto Local y los presupuestos de la Junta para 2001. Y es en este último punto donde va a poner el acento. En opinión del secretario general del PP, Antonio Sanz, el Gobierno autonómico no debe estar tan atento de lo que venga de Madrid como de gestionar mejor los recursos de los que dispone. En este sentido augura que la ejecución del presupuesto de inversiones de este año va a ser la peor desde que gobierna en Andalucía Manuel Chaves. "No se va a llegar al 50%", afirma Sanz. Los populares van a incidir en que es necesario, para dar un salto en el desarrollo andaluz, aumentar las inversiones en el presupuesto andaluz. "Hay que pasar del 15% del presupuesto para inversiones al 20% y es necesario cambiar los objetivos", afirma Sanz.

El segundo gran bloque de los socialistas para los próximos meses es otro de los ejes de la pasada campaña electoral: la construcción de Andalucía en clave de progreso. El portavoz parlamentario, José Caballos, señaló que el acento social se pondrá en la igualdad de oportunidades en todos los terrenos (desde el acceso a las nuevas tecnologías a los servicios básicos), con medidas distintas a la dinámica neoliberal del PP. "No sólo vamos a enfrentarnos a las políticas de derechas, sino que en Andalucía se adoptarán decisiones similares a la de la subida de pensiones no contributivas, el contramedicamentazo o la semana laboral de 35 horas, que marcaron la diferencia con el Gobierno central en la pasada legislatura", anunció Caballos.También merecerán atención especial por parte del PSOE temas sectoriales como la pesca, el olivar, los combustibles, la inmigración o las bolsas de pobreza de las ciudades.