"Desde 1990 no hacía una vuelta así"
"Desde 1990 no hacía una vuelta así", proclamó con el temblor propio de los emocionados. Txema Olazábal estaba eufórico ayer, después de hacer un recorrido histórico y romper el récord del campo -de 65 golpes- en el Campeonato de la PGA, con 63 golpes. Sólo le dolí una espina: la del hoyo 17. "Me ha fastidiado un poco no meter ese put porque me hacía mucha ilusión hacer diez golpes por debajo del par. Tiré un buen put pero en el último centímetro no ha querido entrar. Eso me ha afectado un poco y en el hoyo 18 se ha notado. He tirado a bandera y me he quedado un poco lejos del hoyo, con lo que hacer el birdie me ha resultado complicado. Me ha quedado un put difícil".Olazábal, que ha pasado de segundón a aspirante a levantar el trofeo, hoy en Louisville, dijo que lo mejor de su juego fue el drive. "Ha sido un día espectacular; el put ha respondido bien y he conseguido hacer grandes tiros a bandera. Eso hace que el gol sea mucho más fácil. Además, cada vez que te pones delante de la pelota hay que estar cien por ciento confiado de lo que eres capaz. Y eso es lo que he hecho hoy".
"Realmente he disfrutado con mi juego hoy", dijo Olazábal, que se perdió casi dos años de juego por una lesión en el pie. "Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que me lo pasé tan bien en un campo de golf".
El golfista vasco aclaró que piensa tomárselo con calma de cara a la última jornada. "Mi objetivo es recuperar el juego y sentirme cómodo en el campo". Sobre el líder, Tiger Woods, Olazábal habló con admiración: "Tiger está irresistible... no me sorprendería que se ponga a 15 golpes por debajo del par".
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