_
_
_
_

Las familias afectadas por el soterramiento en Cádiz son realojadas en viviendas municipales

El Ayuntamiento de Cádiz procedió ayer al desalojo de las seis familias que residían en las viviendas que tuvieron que ser derribadas para que continuasen las obras del soterramiento de la vía del tren a su paso por la capital gaditana. El inmueble de los números 34 y 38 de la calle Trille, una vieja estructura ubicada en este popular barrio de la ciudad, fue demolido por su proximidad al trazado ferroviario soterrado y la nueva avenida que cubrirá la vía. Los vecinos afectados, la mayoría personas mayores que no conocían otro hogar, han sido trasladados a viviendas municipales.

Escombros y polvo

Estas viviendas, que han sido rehabilitadas con una inversión total de 6,5 millones de pesetas, han sido ocupadas por estas familias en régimen de alquiler con una renta baja. Cada una de las familias ha recibido además una indemnización de 360.000 pesetas, concedidas por el Ministerio de Fomento, para hacer frente a los gastos de mudanza, altas de suministros y demás inherentes al traslado. Además de estas personas, también se procedió al realojo de otra familia afectada que residía en una caseta de Renfe en la Avenida de Portugal.La alcaldesa de la ciudad, Teófila Martínez, acudió al acto de demolición, durante el que agradeció "encarecidamente" a los vecinos la predisposición mostrada ante este problema. "Los pequeños sacrificios de personas mayores o con pocos recursos como éstas son los que los ciudadanos y las autoridades debemos valorar más. Son personas que han vivido aquí toda su vida y se dejan la mayoría de sus recuerdos en beneficio del desarrollo y prosperidad de Cádiz", destacó Martínez, quien subrayó la importancia de esta actuación y el doble objetivo conseguido.

"No sólo cumplimos con una de las actuaciones más especiales que se enmarcan en el proyecto del soterramiento, sino que conseguimos eliminar aquellas casas que, por su antigüedad, no estaban en buenas condiciones y que tarde o temprano habrían sido derribadas", explicó.

El agradecimiento de la alcaldesa fue recíproco por parte de los vecinos, que destacaron la preocupación que la edil dispuso desde que se conoció el desalojo forzoso. "Es como mi primera luna de miel porque me han dado un piso lindo", dijo una de las mujeres trasladadas.

El viejo inmueble fue demolido pasadas las 9.30 horas ante la mirada de sus antiguos propietarios. En poco más de una hora la estructura quedó reducida a escombros y polvo. Durante la acción de la excavadora, se sucedieron las escenas de emoción. Unos de los vecinos más afectados, Francisco García Vela, no pudo reprimir las lágrimas al contemplar la demolición. "Siento mucha emoción porque veo cómo derriban los muros que nos han cobijado desde el año 1947. Son tantos y tantos recuerdos buenos, menos buenos o malos, con la desaparición de los seres queridos", comentó a dura penas, con la voz entrecortada, al tiempo que se cobijaba en el abrazo de familiares o vecinos de toda la vida.En parecidos términos se pronunciaba otra afectada. "Me ha dado mucha pena porque son 47 años, pero me voy contenta por la amistad que me llevo de mis vecinos", comentó.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Con todo, los sentimientos de todos ellos tendrán un lugar de recuerdo y memoria. Una de las vecinas trasladadas ofreció al Ayuntamiento una gran palmera que decoraba el patio interior de su morada.

El ofrecimiento fue recogido de inmediato por la alcaldesa, quien anunció que el árbol será replantado en el parque Genovés o en los Jardines de Varela de la ciudad de Cádiz como símbolo de las casas demolidas. "Le he regalado a la alcaldesa mi palmera como si fuera un hijo y me ha prometido que tendrá el sitio donde esté más bonita para que la tengamos de recuerdo", precisó la mujer.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_