"Con los terrenos militares se podría hacer un nuevo pueblo"

Juan Manuel de Jesús (PP), fotógrafo profesional de 41 años, es alcalde de Barbate desde hace un año. El municipio posee 25 kilómetros de litoral y una docena de playas vírgenes. Bajo su tutela quedan dos mecas del turismo español. Zahara de los Atunes y Los Caños de Meca. Sin embargo, el desarrollo turístico del término es deficiente, el paro es elevado y los problemas sociales se agolpan. Se ha puesto en marcha la redacción del PGOU, que pondrá las bases para la diversificación económica, estrechamente ligada a la pesca, y para convivir con un campo de adiestramiento de la armada y sacar provecho de la presencia de un parque natural.Pregunta. ¿Cómo se explica los problemas económicos y sociales de Barbate pese a tener 25 kilómetros de litoral privilegiado?

Respuesta. Tenemos la suerte de tener esta costa, con una calidad envidiable, con acantilados y un parque natural. La naturaleza se ha portado bien con Barbate pero, lamentablemente, no hemos conseguido que se hayan desarrollado industrias complementarias a la pesca. Tenemos un potencial turístico por explotar pero faltan infraestructuras. Seguimos dependiendo del acuerdo pesquero con Marruecos.

P. ¿La apuesta de futuro de Barbate es el turismo?

R. Estamos convencidos, aunque hay que seguir luchando para que el sector pesquero siga funcionado lo mejor posible. Pero, a la vez, hay que desarrollar una industria turística sostenible e inteligente, sin cargarnos la gallina de los huevos de oro.

P. Los pasos que tiene que dar son de gigante ¿no?

R. Hay núcleos como Zahara de Los Atunes, Los Caños de Meca y Zahora donde se ha permitido una edificación sin control que ha convertido la zona en caótica y donde difícilmente se puede articular una estructura turística sostenible. Hace falta garantizar primero los saneamientos y el suministro de agua

R. ¿Qué turismo necesita Barbate?

R. No podemos hablar de un turismo de golf porque no hay espacio, pero tenemos que ir hacia un turismo que respete el parque natural y apostar por los deportes marítimos, ya que tenemos un puerto deportivo infrautilizado. Hay que compatibilizar todo lo relacionado con la naturaleza y que se convierta en una peculiaridad positiva. Queremos un turismo de claridad que busque naturaleza, tranquilidad y deportes.

P. Rompe usted la tendencia a ver el parque natural más como un lastre que como una virtud.

R. No se ha sabido planificar teniéndolo en cuenta. Se ha permitido el caos, que se construya sin regular, sin agua ni saneamiento, con cortes de agua, sin zonas de aparcamientos. Ahora es más complicado reconstruir. Ha faltado previsión para saber aprovechar la riqueza.

P. Pese a todo, Los Caños y Zahara de los Atunes están de moda.

R. Porque tienen un encanto que supera sus carencias pero, por ejemplo, no hay un hotel junto al puerto deportivo, aunque ya hay una oferta de un grupo de empresas y otra propuesta para construir un hotel de 400 habitaciones, de una sola planta, en Los Caños.

P. ¿Habrá mano dura durante la redacción del PGOU, habrá demoliciones?

R. Queremos hacer un esfuerzo con el director del Plan, González Fustegueras, para alcanzar consensos con empresarios, vecinos y promotores . Hay que conseguir que se deje de construir hasta que se diseñe qué se va a hacer. Si hay que poner medidas de disciplina urbanística que incluyan la demolición, se hará, pero preferimos convencer de entrada a todos de que hay que parar de construir.

P. El centro de Adiestramiento del Retín es un territorio costero natural virgen que ocupa casi el 30% del término municipal. ¿Qué haría allí si se desafectara de uso militar?

R. Allí sí que habría enormes posibilidades. Sería como si nos tocase la lotería. Se podría hacer un nuevo Barbate.

P . ¿Ve posible que los barbateños muden su mentalidad ligada al sector pesquero hacia el desarrollo del sector servicios?

R. La necesidad obliga. Estamos en una situación muy difícil y es necesario formar a gente que se comprometa con el desarrollo turístico de Barbate. La gente lo aceptará, aunque va a ser fuerte el cambio, porque hemos estado convencido de que nuestro futuro venía por la pesca. Pese a todo los que nos gustaría es preservar la actividad pesquera.