Protestas en Sanlúcar por la muerte de un presunto delincuente
Le dieron el alto
El juzgado de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) ha abierto una investigación para determinar las circunstancias de la muerte, en la tarde del miércoles, de José D. R., El Patano, de 33 años, como consecuencia de un disparo efectuado por un policía en el curso de una persecución en la plaza pública de la sanluqueña barriada de Huerta de San Cayetano, donde ayer se produjeron actos de protesta. A la investigación judicial se ha sumado el informe elaborado por la comisaría de policía de Sanlúcar, en el que se relatan los hechos y la toma de declaración al agente que llevaba el arma en el momento del suceso.Un portavoz del del Cuerpo Superior de Policía anunció ayer que no habrá información oficial sobre este asunto hasta después de conocido el informe del forense. Mientras, la Subdelegación del Gobierno en Cádiz se limitaba a confirmar el traslado del informe de la policía al juzgado número uno de Sanlúcar, que ha decretado el secreto del sumario.
De esta forma, no hay confirmación oficial respecto al número de impactos recibidos por el fallecido. Mientras que algunas fuentes hablan de un disparo, otras indican que fueron tres.
Según la primera versión oficial, los agentes reconocieron a la víctima sobre las ocho de la tarde como un conocido delincuente común, con 30 detenciones previas. Le dieron el alto y el sospechoso se dio a la fuga, por lo que se efectuaron tiros de advertencia al aire. En el curso de la carrera uno de los policías resbaló, y su arma se disparó de manera fortuita, alcanzando al perseguido, que murió poco después como consecuencia del balazo recibido.Esta línea argumental no coincide con la ofrecida por vecinos testigos de los hechos, según los cuales el policía apuntó al cuerpo del sospechoso antes de disparar su arma. Irritados con la actuación policial, un grupo de unos 70 vecinos levantó barricadas y quemó contenedores cerca del lugar de los hechos. Según explicó la concejal de Seguridad Ciudadana de Sanlúcar, Laura Seco, los vecinos, en su mayoría jóvenes, llegaron a ocupar ocasionalmente la calzada. Los disturbios se prolongaron hasta la una y media de la madrugada.
Otro grupo se concentró a media mañana de ayer en la barriada, en su mayor parte de viviendas sociales situada en la zona alta de la localidad, en señal de protesta, llegando algunos a llamar "asesino" al agente. Algunos de ellos llegaron a manifestarse frente al juzgado para "pedir justicia".
El alcalde, Juan Rodríguez Romero, del PP, calificó ayer de "lamentables" los hechos y exigió que se aclaren en el más breve plazo de tiempo posible, "confiando en que sea la justicia la tenga la última palabra".
Por su parte, Izquierda Unida ofreció una conferencia de prensa en la aseguró que la versión oficial es "muy difícil de mantener ya que en la plaza donde ocurrieron los hechos había decenas de personas, muchos de ellos niños, que resultaron testigos". IU hace referencia a testimonios de vecinos que afirman que el policía, rodilla en tierra, hizo tres disparos contra el joven, que escapaba por una ventana, tras haber hecho una carrera".
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